Provocar ...
Ya sabíamos que el euskonazismo, como cualquier nazismo, produce una patología psíquica que pervierte la perecepción del mundo exterior. Pero la ciencia está avanzando tanto en el conocimiento de la perversión, que ya es capaz de proporcionarnos la imagen mental con la que los euskonazis se representan a Antonio Aguirre andando sin miedo delante de ellos, cuando acude al juzgado.
Una imagen tal que esta:
Pero la realidad es la realidad, y no lo que los euskonazis y su Ertzaintza quieren imaginar:
Era conocido, pero lo hemos vuelto a comprobar. Estos chicos del PNV se ponen de los nervios, cuando ven a alguien con un par.
Y encima, con agravantes: ocurrió a pocos metros de los Jardines de Albia, y a pocos días del aniversario de la fatídica fecha en que Arana, el cretino, padeció la revelación de la gran nación sioux, perdón, eúskara. ¡Menuda provocación! Si es que no se puede aguantar …
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En fin, no olvidemos el nombre de la criaturita, que se merece esta cárcel de papel: Aramburu Corral. Y no olvidemos el nombre del partido que, para asustar a los jueces y a los discrepantes, le azuza primero, y le protege y comprende después: PNV, - Partido Nacionalista Vasco.
Pues no, queridos euskonazis. Nos daréis coces en los huevos, incluso nos mataréis, pero no nos callaréis. ¿Está claro?