Entre el timo ZoPenco y el timo Gore
Hay veces que se quitan las ganas de seguir la política nacional y las cosas de la trinca del ZoPenco. Añadido a eso los asesinatos -de nuevo- de guardias civiles, -que sí, que sí, que Rubalcaba estaba mintiendo de nuevo cuando describía el atentado, y ZoPenco ha tenido que “blindar” el segundo funeral para que no le abucheen-, lo que apetece es mirar hacia afuera.
Hacia afuera, pero no hacia Venezuela. No precisamente. Ahí nuestros Zopenquis siguen empeñados en zopenquear, y hacernos pasar vergüenza. Como Moratinos y sus tejemanejes que si se inventa mensajes del rey a Chavez, que si se inventa visitas del príncipe, que si desmiento, que si no, que si vice Vogue dice que no era verdad. Debe ser una técnica de psicología-estrategia electoral, que pasa por deprimir hasta la extenuación al cuerpo votante.
Así que en situaciones como esta nada como mirar hacia afuera, pero hacia afuera, fuera. Por ejemplo, al Gran Timo Global, sobre el que hay noticias que ustedes no verán en sus medios habituales, ni las oirán mencionar a su partido político favorito. Ni tan siquiera a UPyD, que en su presentación en Bilbao dejó bien claro que se sumaba al gran timo del calentamiento y el alarmismo climático algorero. ¡Bien hecho! Y sin más divagación, entramos en materia.
Resulta que un equipo de científicos de la NASA, que no es nada sospechosa de escepticismo global, ha descubierto un cambio en la circulación de la corriente del Océano Ártico, inducido por cambios en la circulación atmosférica que varían en escalas de décadas. A resultas de lo cual deducen que, ¡vaya por dios!, no todos los cambios que hemos visto últimamente en el Ártico, y que tan agobiados nos tenían, son el resultado de tendencias a largo plazo del calentamiento global. repetimos: no es por ningún calentamiento global ni por ningún fenómeno a largo plazo. Son oscilaciones naturales que ocurren en la escala de décadas.
Lo cierto es que hace tiempo que los “escépticos " decían que lo del Ártico era cosa de las corrientes marinas, nada que ver con la temperatura del planeta ni mucho menos con el CO2, pero el quid está en que lo diga la NASA y el JPL.
Así que ya podemos irnos olvidando de todas esas fotos impacto sobre la disminución de la capa de hielo del polo norte. Aquí mismo pusimos una, la correspondiente al último septiembre, pero esta de El País es mejor aún:
Pues ahora, según nos cuenta el artículo [+] del Jet Propulsion Laboratory, resulta que el hielo del norte no está desapareciendo por la temperatura global, sino por las corrientes marinas del Ártico. Y como esta ha cambiado a como era antes de 1990 (en sentido horario), piensan en la NASA que la banquisa empezará a aumentar de superficie.
Bueno, la noticia tiene un mes, es del 13 de noviembre, y está publicada en la propia web del JPL. No estamos hablando del CSIC y sus animosos palmeros, debería haber tenido resonancia. Pero que levante el dedito aquel de nuestros lectores que haya oido mencionarla. ¿Nadie, eh? Pues claro, hombre, porque estas son las auténticas “inconvinient truths”, y estas son por tanto las que no salen, y nadie se entera. Porque solo a base de ocultar lo que no conviene que salga, puede mantenerse en pie la ficción esa de la unanimidad científica y la falta de discusión.