La sentencia Atucha.

Dos factores muy importantes de la “sentencia Atucha”.

• Les explica con claridad a los nazionalistas que no están por encima de la ley.
• Matiza la "sentencia Botín", que parecía desactivar la acusación popular.

Lo primero no necesita más cometario. Que se vaya preocupando Ibarreche, que ya no vale lo de -¡no faltaba más que el Kalendari no pueda ...". Pues no, Kalendari; si va contra la ley, no puedes. Es la esencia de la democracia, pero eso es algo que está por encima de tus posibilidades. En realidad comprender eso está por encima de las posibilidades del nazionalismo.

Lo segundo es más relevante a largo plazo, y no solo para el caso particular del Kalendari. Parecía que el Supremo había desactivado la “acusación popular"plasmada por la Constitución, en cuanto decía que no era aceptable una acusación popular si no estaba acompañada por una acusación de la fiscalía y/o de alguna acusación particular. Muy chungo.

Pero al menos ahora el Supremo ha aceptado la proposición de la defensa de que este caso no era comparable al de las cesiones de crédito de Botín, porque al no haber en el delito de desobediencia perjudicados directos, no podía haber acusación particular en el caso de Atucha. Y el Supremo ha aceptado, en esta circunstancia, la validez de la acusación popular (Manos Limpias),  aunque no vaya acompañada por acusación de la fiscalía.

La fiscalía, por cierto, en este caso se ha apuntado a todas las tesis de la defensa. El gobierno de ZoPenco, encantado de que Atucha se fumara un puro con las disposiciones de los jueces. ZoPenco es así.