Y dale con las banderas.

Foto de El Mundo (Justy): Operarios del ayuntamiento colocando la bandera.

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El ayuntamiento de Bilbao cumple a sentencia del TSJPV de tener izada la bandera española a diario, en lugar preferente. No debería haber más misterio ni más problema, ¿verdad?

En un país normal no, pero en el país de Mondragón [-->] los coleguis de los pistoleros nunca aceptan cuando no puedan imponer sus caprichos a los demás. No entienden que a pesar de tanta bomba y tanto asesinato, todavía queden instituciones que no les obedezcan. Dice El Mundo:

... el domingo 7 de abril, está prevista una manifestación convocada por un grupo de colectivos de la izquierda abertzale contra lo que consideran una 'imposición' y bajo el lema 'Somos una nación. Geurea Ikurriña!' (La nuestra, la ikurriña).Durante la rueda de prensa en la que se presentó la marcha, se hizo un llamamiento a todos los vascos para que protesten por una medida que, consideran, "sólo sirve para enfadar, encrespar y hacer daño a los bilbaínos y bilbaínas" y para "profundizar más en el conflicto político que estamos viviendo".

Vasquilandia Tremebunda. Resulta que la ikurriña de la payasada araniana no puede crispar ni enfadar a nadie, pero cualquier símbolo de la nación con la que se han identificado los “bilbaínos y bilbaínas” desde que nació la villa, debe de provocar encrespamiento y algarada calle borrica. Así estamos.

Aquello que resulta gustarle a los matones, se considera “normalización”; y lo que no les gusta es “profundizar el conflicto”. Y los que gobiernan dicen que ni sí ni no, que yo recojo las nueces.  Pero mientras no quieran aceptar que la única “normalización”, lo único normal, es meter a los matones entre rejas, jamás tendremos un país ni medio normal.