Los nacionalistas y su berza se van al monte. Aberri eguna.
Hay una maldición, apócrifa, que los americanos atribuyen a la cultura china: que vivas tiempos interesantes.
No temáis, nosotros no vivimos tiempos interesantes. Solo vivimos dentro de una payasada sin gracia llamada Vasquilandia Tremebunda. No se ríen los payasos, porque creen estar interpretando una odisea, y se toman en serio. Y no se ríen los espectadores, porque los payasos, de vez en cuando, matan. Y el problema es que los payasos, sin los asesinatos, tendrían más gracia. Y como no quieren que se rían de ellos, no pueden dejar de matar.
Tampoco pueden dejar el poder, y por el mismo motivo. Un payaso en el gobierno te puede hacer daño, si llega a fijarse en tí, porque te ríes más fuerte que los demás. La correspondiente maldición China es: Que las autoridades se fijen en tí.
Al grano: Después de 30 años con gobiernos formados por construtores de nacioncitas, y con la nacioncita tan quimérica como al principio, los nacionalistas pierden el gobierno. Situación por lo tanto novedosa, y presuntos “tiempos interesantes”. ¿Que harán los nacionalistas? ¿Pactarán con Pachindakari para minimizar pérdidas? ¿Tratarán de minimizar las pérdidas desde la oposición, condicionando al débil gobierno por los pelos que tienen enfrente?
Mal empiezas. Lo estás mirando con mente europea, y no con espíritu de república bananera (o para el caso monarquía). Un payaso es siempre un antisistema. O un niño, que viene a ser lo mismo. Cuando tiene que compartir el juguete, rompe el juguete.
Rompen el juguete y vuelven a sus orígenes, de los que nunca renegaron, aunque disimulaban. Rescatan a Cretino Arana, la berza:
La patria de los vascos es Euskadi. Nuestra única patria es Euskadi. [LD:-->]Y si ellos vuelven a sus orígenes, supongo que los demás podremos volver a los nuestros. Yo, por ejemplo, rescatando a mi bisabuela la carlista hacia 1915 (el resto eran liberales y no creo que pensaran mucho en los nacionalistas):
¿Los nacionalistas? ¡¡¡Payasos!!!--
Pues bien, queridos nacionalistas, es posible que los demás no seamos vascos. A mí, particularmente, me importa un carajo. Pero lo que es seguro es que acabáis de quitaros la careta, y hemos asistido a un espectáculo prodigioso. Los payasos profesionales llevan una careta de payaso por encima de su cara de ciudadano adulto y responsable. En vuestro caso, era al revés. La única sorpresa aquí es la gran cantidad de gente (léase votantes) que parecía no darse cuenta. Y les acabáis de fastidiar el cuento.
Fuente: La foto de la muñeca de trapo viene de David de la Parra.
Próxima fuente: Avinareta, lector empedernido, -extraño fenómeo-, nos pasa esta perla de la que daremos cumplida cuenta. Sabino Arana, según el PNV –>. Y como los chicos del pueblo de siete mil años -inventado hace cien- se van al monte con su berza, habrá que estudiar la berza. Aunque dé una inmensa pereza.
Y sin embargo es muy posible que merezca la pena intentar conocer a estos asilvestrados, porque estamos condenados a convivir con ellos durante mucho tiempo. No se van a civilizar en dos días, si no lo han hecho en cien años. Y en la obra citada veo que hay cosas de interés. Como este relato, de una precisión quirúrigica, del nacimiento de la “idea " de una nacionalidad vasca. Describe un viaje de Luis Arana en tren, junto a un santanderino. Y el de Santander no le entiende:
Pues mira, eso es lo que no entiendo bien. Si los vizcainos sois españoles y vuestra patria es España, no sé como queréis gozar de unos fueros que los demás españoles no tienen y eludir obligaciones que a todos los españoles deben comprender por igual ante la patria común. Gozando de los fueros no servís en el ejército español, ni contribuís con dinero al Tesoro de la Patria. No sois buenos españoles...¿Conclusión? -Ah, pues si no podemos ser la niña bonita y privilegiada del baile, entonces … ¡no somos españoles! Prodigio intelectual que como es sabido Luis inculcó en su hermano Sabino el día de la iluminación de la patria vasca, un domingo de resurección de 1882. Según el Kalehendari, siete mil años rumiando la idea para lograr un parto tan brillante. Y no le da vergüenza.(Eguileor, Manu “Marcos de Urrutia”, Arana-Goiri’tar Sabin en la Historia de Euzkadi, pp. 31-34.)