Charlando con Josu Erkoreka
Bueno, charlando es un decir. Escribiendo en su blog. Aunque, ¿quien sabe? En ese post no hay comentarios todavía, después de dos días, así que lo mismo se anima. Y aunque no controlo, me pega que Erkoreka es de la sección menos trabucaire del PNV. Vamos, que creo que no va en el estilo ni de Anasagasti, ni del cabezón ese que decía que ETA es una forma de lucha moderna de minorías contra mayorías, y de cuyo nombre no quiero acordarme.
El caso es que Erkoreka diserta sobre el asunto ese tan aburrido del monoeditorial de la dignidad de Cataluña, oh, la, la. Con una conclusión extraordinaria, heredada -al parecer, de Montilla.
Y se lamenta de que aquí pueda gobernar el PSE con el PP, que allí sería imposible. Y aun ve otra diferencia entre Vasquilandia y Cataluña, que le da pie al artículo. Que aquí sería impensable un monoeditorial comparable.Pues bien, como los nacionatas no suelen dajarse hablar así como así en cosas de la política, he preferido entrar dándole la razón, y abundando en su tesis:
Por cierto, hay amigos que los hijos de Arana no consiguen quitarse de encima. Tal vez esa sea otra diferencia. Y no es que a uno le importe un carajo ser vasco o no serlo. Pero hay cosas que dan cierta vergüenza, como que esos bailarines de la web de la esvástica pretendan representar "lo vasco", y que esté representado en ese sitio -gracias al PNV.
Pero lo peor de todo es que Erkoreka se olvida de la diferencia principal. Tal vez debería pasarse por Sabin Etxea y pedir el libro adecuado para ilustarse: