Vas a pagar para que los senadores puedan expresarse en lenguas en las que no se entienden
Y es que conviene no olvidar este pequeño detalle que a los zapateros no les interesa que recuerdes: las bobadas de los políticos tienen precio, y lo pagas tú. Por ejemplo la bobada a la que se suma el PSOE de usar lenguas locales (les llaman “autonómicas”) en el senado.
En principio no parece que sea algo que tenga la menor relevancia, puesto que nadie ha sido capaz de demostrar nunca que el senado sirva para algo. Salvo para sacar dinero de tu bolsillo, en dirección al bolsillo de los políticos. Pero quitando eso, parece indiferente que el senado exista o no exista; que se entiendan en castellano, o que no se entiendan en lo que es ponga. O que bailen la yenka. Sin embargo sí importa por el precedente, y por el ambiente. Por la disculpa alegada.
Para que prevalezca el derecho de los individuos a expresarse en sus propios idiomas [-->].Pero es que ocurre que en este caso los individuos son senadores. Unos tíos a los que les pagas el sueldo, no se sabe muy bien para que hagan qué. Y que ahora piden más dinero, para que prevalezca su "derecho" a expresarse en su propio idioma. ¿Y de donde viene, donde figura ese "derecho"? No existe; no hasta que no aprueben el nuevo atropello sacacuartos. Salvo que los "progres" se hayan pasado ahora al iusnaturalismo, al derecho de origen divino, o a un prodigio similar.
Hablando de prevalencias, no estaría de más que pienses, antes de votar, qué te interesa que prevalezca. Que te saquen los menos cuartos posibles, y que los que te sacan se dediquen a tu salud, educación, carreteras, etc, o que tus representantes puedan elegir la lengua que les salga de su capricho -perdón, “derecho”. En realidad, aunque te sorprenda, es cosa tuya. No viene de dios, ni de la naturaleza, ni de un mandato telúrico, ni de la genética. Viene de lo que tú eliges, en lo poco que puedes elegir. Tú sabrás si prefieres Babel, o prefieres salud, educación, carreteras, etc. Porque para todo no da.
O más lenguas, o más servicios, o más dinero. Esa es la cuestión. Tu cuestión.
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