Hacia la oclocracia en España
Remitido por "Jazmín"
--Envío el siguiente texto por si interesa colgarlo en el blog, o enlazarlo al blog de dónde lo he sacado, el blog es: “La verdad de la Política”. Jazmín.
Es una serie de dos artículos. Pongo el comienzo de ambos, y el enlace al original, para no robarle “clicks”. PM.
–
Hacia la oclocracia en España - I
Quiero abandonar el tono jocoso e irónico de los últimos artículos publicados para ocuparme de un grave problema que está aconteciendo en nuestro país y dirigirme a todos los compatriotas que quieran leerme, con la máxima seriedad y rigor posible, porque la cuestión es muy importante.Había esperado, inútilmente, ver en los numerosos artículos que cada día se producen sobre la cuestión política en España la aparición del término OCLOCRACIA, pero no ha habido suerte; el nivel cultural de los que se ocupan de la política en este país, políticos, jueces y periodistas es demasiado bajo para entrar en definiciones con propiedad y criterio. En fin, vayan quedándose con el término, porque seguro que a partir de ahora lo verán citado con frecuencia (sin mencionar la fuente, por supuesto).
Oclocracia etimológicamente significa gobierno de la muchedumbre y según las enseñanzas de Aristóteles es una de las tres formas posibles de la degeneración del Gobierno, en concreto de la Politeia, que podría traducirse como la forma de hacer las cosas en la política siguiendo las reglas establecidas, por ejemplo por la Constitución. Las otras dos formas de degeneración de la actividad política son la oligarquía –gobierno de una élite en la que se concentra el poder- y la tiranía –gobierno de un déspota-, que también se expresan en nuestro país, pero vamos a ocuparnos de la oclocracia.
Si la democracia es el gobierno del pueblo, una entidad constituida y establecida, sujeta a derechos y deberes, que se desenvuelve en el ámbito de unas reglas establecidas previamente, la oclocracia es precisamente el gobierno de la muchedumbre que actúa por inducción del poder establecido que se convierte exclusivamente en su representante.
Seguir en el sitio original:
----
Hacia la oclocracia en España II
En vista de la extraordinaria acogida que ha tenido el artículo publicado con el mismo título, vamos a seguir profundizando en el término oclocracia, aprovechando algunas consideraciones que se han hecho en el grupoMovimiento Democrático de Facebook, precisamente el autor que suscribe oficialmente con el nombre del grupo, hizo una sugerente aportación que transcribo:“El mayor ejemplo reciente de oclocracia que se puede citar en la Historia de España -añadido a los citados por Biante- fueron las algaradas organizadas por el PSOE en los días 12 y 13 de marzo de 2004 tras el gravísimo atentado de los trenes en Madrid y en plena jornada de reflexión electoral. Bajo la consigna mentirosa del “queremos saber” distribuida a cientos de miles de ciudadanos a sus móviles, las caceroladas y las palabras de Rubalcaba: “España no se merece un gobierno que nos miente”, se logró un dominio sobre masas en movimiento que hicieron ejercicio de una violencia inusitada -recuérdese los ataques a las sedes del PP- creando la ilusión de que era necesario un cambio de gobierno sobre la base de que esa era la voluntad popular. Esos actos profundamente olocráticos tuvieron como resultado el cambio de voto en 3 millones de españoles y la llegada al poder del político más nefasto e incapaz de los últimos 200 años de la Historia de España” (Movimiento Democrático).
Ciertamente, la democracia fue usurpada el 11-M de una forma extravagante a los electores (el pueblo español), con una información manipulada, repleta de infamias contra los gobernantes salientes, con una campaña de agitación en el mejor estilo bolivariano (“No a la guerra”), azuzada por los partidos de la izquierda española, fundamentalmente el PSOE e IU, y la colaboración de los nacionalistas. El pueblo se manifestó en las urnas, convirtiendo en democrático un resultado fundamentado en la violencia, el acoso, y la difamación, convirtiendo al gobierno del Presidente Aznar, por juicio popular de la muchedumbre agitada por los socialistas y comunistas, en el responsable de lo ocurrido el 11-M por haber enviado tropas en labores humanitarias a la retaguardia del frente anglo-norteamericano. En Irak no murió ningún soldado, ni se tiene constancia de que ningún soldado español disparara un solo tiro, sin embargo en Afganistán, donde no ha dejado de enviar fuerzas el Gobierno de José Luís nos acercamos ya a los cien soldados muertos, para que Obama le siga invitando a los desayunos de oración.
Lo ocurrido los días 12 y 13 de marzo, en plena jornada de reflexión, con un pueblo atenazado por la ira, el espanto y la tristeza recuerda al asalto al Palacio de Invierno en San Petersburgo por los soviets, que trajo como consecuencia la época de mayor sufrimiento histórico para las repúblicas del socialismo real. Fue un ensayo de Golpe de Estado Revolucionario, que tuvo sus precedentes en las campañas de acoso y derribo al gobierno en el caso del Prestige y el “nunca mais”.
Las urnas legitimaron la barbarie, desde entonces hemos vivido en la época de mayor crispación política de la historia de España, al mismo tiempo que el declive económico y político en todas las instituciones del Estado nos ha conducido a una situación delirante.
Seguir en el sitio de origen: