Los que apestan.
Clemente Polo, que parece ser el único español que sigue el apasionante apartado de la Cosa Nostra llamado Caso Palau, rescata esta perla en “Se estrecha el cerco” (LD). Posible piedra angular sobre la que pivota la explicación de lo que pasa y, sobre todo, de lo que va a pasar:
si entramos aquí, nos haremos mucho daño porque entonces... podría decir... éste le dio tanto a tanto, éste le dio tanto a tanto y éstos dieron tanto a tanto... [y] todos apestaríamos un poco. Jordi Pujol -->.Hay un pequeño fallo en la lógica de Pujol. Fallos en la lógica son marca de la casa nacionalista, pero, ¡caramba!, deberían ponerle algún límite a esa característica. Apestar no puede depender de que se hable o no del hedor; depende del tufo. Y si el Muy Honorable, el honorable por excelencia, despide mal olor, apestará por mucho que consiga que los demás callen ante la amenaza de mentarles sus propios efluvios hediondos. No es que todos apestaríais un poco, sino que todos apestáis un mucho. Se hable más, o aunque solo hable Polo. Para seguir el asunto, en su blog -->.