Los 18.000 de Escaños en Blanco
Que digieran los Zapateros y los nacionalistas amontillados el fostión. Que se entiendan los nacionalistas genuinos con su sopa de letras y de estrategias hacia la nada. Yo prefiero fijarme en lo único que le veo de interés a unas elecciones que producen un parlamento básicamente de chiste. Que es lo que se corresponde con un país de circo como el nuestro. CenB y sus 18.000 votos.
¿Buen resultado, mal resultado? En los comentarios tenemos de todo. Desde “una opción absurda que ha tenido lo que se merecía”, hasta “un éxito brutal” para una formación desconocida.
Para absurdas, algunas de mis ideas. Entre ellas la idea de que las ideas, como las herramientas, no triunfan o fracasan; sino que en cada momento se usan más, menos, o nada. Y que el éxito de un proceso electoral no consiste en que el resultado nos guste, sino que el electorado tenga una oferta suficientemente amplia, la conozca, y elija en consecuencia. ¿Es lo que ha ocurrido en el caso de Escaños en Blanco? Evidentemente no. Evidentemente no había oportunidad de que el electorado juzgara la conveniencia de la idea de contar con el voto en blanco a la hora de repartir los escaños.
¿Sería bueno que lo conocieran? Si crees en la democracia y en la libertad, sin duda ninguna. Libertad se define como la facultad de obrar de una manera o de otra, o de no obrar. Y un sistema donde es indiferente si hay un 1% de cabreados con el sistema, o hay un 50%, no es un sistema ni sensato, ni libre, ni que cuente con la opinión de gente. Luego vienen los Tea Partys, los Berlusconis, los Leluches Coluches o las Cicciolinas. O fraudes como el de UPyD.
También puedo estar equivocado, y resultar que lo de los Escaños en Blanco solo es o absurdo o insensato. Pero lo que no podría aceptar en ningún caso es que la solución consiste en que la gente no disponga de la posibilidad, por no conocerla. Así que, equivocado o en lo cierto, este menda seguirá haciendo lo posible porque se conozca la propuesta de dejar vacíos los escaños que correspondan al voto en blanco. Y, por supuesto, procurando que los demás mendas hagan conocer sus propias opciones en el mismo espacio. Para eso están las plazas públicas.
Y, por supuesto, felicitaciones a Ciudadanos. Hasta ahora hemos simpatizado. A partir de la votación llega el momento de fiscalizar, y de expresarlo con el aplauso … o el abucheo.
Más ideas absurdas: Partidos políticos y candidatos a los escaños deberían ser cosas distintas, o suficientemente separadas. Los partidos deberían ser calderos de ideas, cauce de la opinión de la gente, y arena para la selección de candidatos. Los candidatos deberían ser oferta de gestión de esas ideas surgidas en otro sitio. No tiene sentido pretender que coincidan al 100%, ni que una pequeña camarilla guise y se coma todo el caldo.
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Al margen: También tienen su morbo los 75.000 votos de ese partido friki que basa su mensaje en la protesta por la inmigración musulmana. Especialmente teniendo en cuenta que se trata de un problema buscado conscientemente en Cataluña, como medida en contra del idioma español. Favorecer la inmigración que no habla español, para “catalanizar” Cataluña. Catalanizar Cataluña con el corán y la sharia. Y luego sale un partido llamado Partido por Cataluña, muy catalanista también, protestando. ¿No es apasionante nuestro circo?