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Original: http://plazamoyua.com/2010/12/08/transicion-de-los-socalistas-catalanes/

2010-12-08 - publicado por: plazaeme

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Transición de los socialistas catalanes.

Enviado por Luis Bouza-Brey, un informe de Neus Tomás en El Periódico:

 

 


  • Luis Bouza-Brey 2010-12-08 20:24:10
    Hace seis años, ante la deriva nacionalista del PSC de Maragall, muchos en Cataluña empezamos a preocuparnos y a intentar frenar esa deriva, impulsada desde Madrid por Zapatero. De esa movilización nació Ciudadanos de Cataluña. Pero en Ciudadanos comenzaron las divergencias derivadas, fundamentalmente, de si se intentaba construir únicamente un partido de centro-izquierda catalán que frenara la deriva nacionalista de Maragall en Cataluña, o si se intentaba construir un partido de ámbito español, de orientación amplia de centro-centro-izquierda, que se constituyera en bisagra entre el PSOE de Zapatero y el PP, para frenar la deriva soberanista producida por el papel estratégico de los nacionalistas, como partidos imprescindibles para gobernar en el conjunto de España. A consecuencia la divergencia de ambas concepciones Ciudadanos se partió y nació UPyD, que posteriormente, por cortedad de miras de sus dirigentes, resultó también dinamitado y degradado. Hoy, la opinión pública ha despertado, y Zapatero cae en picado, así como el socialismo etnicista del PSC. Por eso, está cristalizando una nueva situación política en la que se produce una recomposición del sistema de partidos, en Cataluña y el conjunto de España. Y por eso, también, resulta de suma importancia lo que vaya a suceder con el PSC desde ahora, pues en Cataluña se ha producido un vacío en el espacio no etnonacionalista cuya ocupación va a resultar esencial para lo que suceda en el futuro en Cataluña y en el conjunto de España. Pero en Cataluña UPyD ha fracasado, el PP ha crecido, pero todavía no está claro qué puede suceder con él en Cataluña y sus alianzas aquí y en el conjunto de España. Por otra parte, Ciudadanos ha resistido a sus brechas y divisiones, pero su crecimiento y papel pueden ser irrelevantes si no inicia de nuevo una clarificación ideológica, estratégica y de extensión al conjunto de España, puesto que si se queda sólo en Cataluña está condenado a la irrelevancia. A la vuelta de unos meses podemos encontrarnos con un PP pactando con CIU y el PNV la confederación taifal, al PSOE en bancarrota en el conjunto de España y en Cataluña, a IU-IC creciendo hacia la inoperancia y la regresión ideológica y el apoyo al etnonacionalismo, y a Ciudadanos condenado a un papel valiente pero marginal e inefectivo en la taifa catalana. Por ello, creo que conviene que nos espabilemos para influir, al menos ideológicamente, en la situación, a fin de que la nueva situación no cuaje en una deriva hacia el caos todavía mayor, intentando que comiencen a crecer elementos de resistencia en Cataluña ---Ciudadanos, PP y PSC--- y en el conjunto de España (¿una coordinación del archipiélago regeneracionista?)
    • Luis Bouza-Brey 2010-12-08 20:27:26
      Me han salido repetidos muchos "conjuntos de España", quizá porque eso es lo que me preocupa, en relación con el tema de lo que suceda en Cataluña.
  • plazaeme 2010-12-08 20:43:48
    Gracias, Luis. Más interesante, creo, tu comentario que los detalles de quien sube / baja en Cataluña, del artícolo de El Periódico. Al menos para en que no está muy puesto en los prodigios del 4%. Sí, claro que lo que pase en el 4% será importante para el resto, como también lo ha sido lo que ha pasado hasta ahora. Lo que no consigo es acabar viendo posibilidades de que pase nada bueno. Si acaso, siendo optimista, de que algo de lo malo disminuya un poco. Sigo siendo partidario de una crisis de sistema, y no comparto la idea de Buesa de que pasa por el PP y el PSOE arregarlo. Bueno, pasar si pasa por ahí, pero arreglarlo no pueden. En todo caso mi visión de extraterrestre me parece irrelevante. Mejorsi nos tienes tú al tanto de lo que ves.
  • Luis Bouza-Brey 2010-12-08 20:49:39
    Existe otra hipótesis a tener en cuenta en relación con UPyD: ¿será UPyD un partido "flash" similar al CDS, que emerge de la muerte de UCD en momentos en que el PP estaba estancado por el miedo a Fraga y su orientación muy sesgada hacia la derecha, pero comienza a morir con el ascenso de Aznar a la dirección del PP y su orientación más hacia el centro? ¿será UPyD un partido "flash" que emerge en los momentos iniciales como consecuencia de la inoperancia del PP y de la desviación de Zapatero hacia el extremismo, pero que comenzará a morir cuando el PP crece en apoyos y el PSOE-PSC cambie de liderazgo más hacia el centro y menos hacia la izquierda y el etnonacionalismo? Otras hipótesis encadenadas a las anteriores es: ¿queda espacio para el regeneracionismo con un PP con mayoría absoluta y un PSOE en catarsis hacia el centro? ¿Queda espacio para un "movimiento bisagra" que impulse el Pacto de Estado entre PP y PSOE para iniciar una revisión de la Constitución y frenar la deriva oligárquica y caciquil-taifal del sistema?
    • plazaeme 2010-12-08 21:00:55
      A mi UPyD me da igual. Respecto a una eventual regeneración no tiene la menor relación. Puede que tenga un hueco menor e irrelevante, salvo para ellos mismo si consiguen pillar cacho. ¿Queda espacio para un “movimiento bisagra” que impulse el Pacto de Estado entre PP y PSOE para iniciar una revisión de la Constitución y frenar la deriva oligárquica y caciquil-taifal del sistema? Yo creo que la bisagra, por definición, es más pequeña que la puerta y la pared. Y si los grandes deciden que necesitan un pacto de estado, podrán hacerlo mucho más confortablemente prescindiendo de la bisagra. Pero no se me ocurre que el pacto fuera a ser para "frenar la deriva oligárquica y caciquil-taifal del sistema", sino para adaptarla y mejorarla. El poder no tiende a cortarse las alas. Eso hay que hacerlo desde fuera. En un mundo civilizado, desde fuera quiere decir desde antes de la política. O sea, desde una constitución.
      • Luis Bouza-Brey 2010-12-09 15:43:09
        En este post y en el siguiente planteas lo que hay que hacer desde un punto de vista atópico, como si no hubiera nada que hacer salvo hundir el sistema para que fuera sustituido por no se sabe qué: un "movimiento bisagra", tal como yo lo interpreto, defendería ante la opinión pública y sectores receptivos de la élite política la revisión de la Constitución y de la ley electoral mediante un pacto de Estado. Los grandes podrían hacer caso omiso a esta demanda y entonces podrían verse desacreditados ante la opinión pública; o podrían ponerse de acuerdo para seguirla en sus (de ellos) propios términos, y entonces se conseguiría algo. Y si ese algo no fuera suficiente, habría que continuar luchando. Así son las cosas. Pero fíjate en la última encuesta del CIS, que se publica hoy, en la que los ciudadanos apoyan mayoritariamente una reforma constitucional...eso es algo que hace un año era impensable. POr otra parte, el PSC y el PSOE han pagado y seguirán pagando caro el Pacto del Tinell. De ahí sacaran sus conclusiones, pero mejor es que les vayamos presionando ante la opinión en la direcció correcta, a fin de reducir el margen de mamandurria y aumentar el de control. Repito: así son las cosas. La adopción de posiciones anárquicas de rechazo la considero equivocada, aunque ello no signifique que no comparto muchas otras posiciones que mantienes en otros momentos.
  • plazaeme 2010-12-08 21:07:50
    Y yo creo que hay otra versión estable de una deriva caciquil. Que el PSOE comprenda que El Tinell no es un camino al que le puede sacar partido a largo plazo, ni van a gobernar un Reich de mil años con esa idea, y entonces organicen una mamandurria con una razonable alternancia, en la que todo cambia, cada pocos años, para seguir igual. O el pacto y paz de la mafia.
  • Luis Bouza-Brey 2010-12-09 10:46:10
    LO QUE EL PSC NECESITA ES HACERSE SOCIALISTA…, SI ES CAPAZ DE ELLO Luis Bouza-Brey (9-12-10) El PSC ha constituido un fracaso desde su nacimiento: ha permitido un período interminable de gobierno de CIU por haber sido incapaz de conseguir el apoyo de la mayoría del pueblo de Cataluña, al fomentar la abstención de amplios sectores populares que no se reconocen en el etnonacionalismo. Ha sido incapaz de liberarse de la abducción etnonacionalista durante toda su historia hasta que en las dos últimas legislaturas se ha hecho más etnonacionalista que ERC o CIU, traicionando a sus electores y sus principios fundacionales. Con ello ha contribuido a la violación de la Constitución y la democracia en Cataluña, facilitando la victoria abrumadora del soberanismo de CIU, con un programa de concierto económico que rompe definitivamente con la unidad de España y la Constitución del 78. Y todo ello a causa de la hegemonía de sus propios “señoritos” internos fundadores del partido y de la obediencia torpe y ciega a las políticas zapatéticas durante siete años. ¡Y ahora, los nuevos ministros de Zapatero le piden que subordine sus posiciones a las políticas soberanistas de CIU, a fin de permitir la agonía zapatética, transformándose nuevamente en un traidor reincidente ante sus electores! ¡El PSC lo que necesita es hacerse socialista de una vez!: liberarse de etnonacionalismo y enfrentarse a él; formular con claridad una orientación socialista que defienda las aspiraciones populares y se deje de mandangas identitarias, reaccionarias y fomentadoras del privilegio y la desigualdad; defender de una vez la unidad de España y el autogobierno solidario; imponer la disciplina o la expulsión de los que ni son demócratas, ni españoles, ni socialistas en su interior; liberarse de aliados fulleros u obsoletos, y concretar de una vez la que debería ser su identidad constitucionalista, democrática, liberal, socialdemócrata y defensora acérrima de una España unida y plural. Si no lo hace, el pueblo de Cataluña no soportará más sus delirios amorfos de zombi abducido por la reacción etnonacionalista. Ha traspasado los límites de la traición y el pueblo lo ha percibido. ¿Será capaz de cambiar? Posiblemente sus genes se lo impidan: demasiado “señorito” y escalador social sin criterio en sus filas.
  • Jose Maria 2010-12-09 11:36:26
    Luis, que mal panorama. El Psoe a la m. el PP sin ganas de cambiar las cosas sino solo de heredar. La galera hundiendose y mejor esta hundida, Ciudadanos esperandole pero me temo que no llegaran y se conformaran con continuar en su "rinconcito" ?que queda? pues no mucho solo el raca raca y que al final (con la ayuda de fuera o el impulso de fuera) los de la mamandurria se vena olbigados a cambiar cosas para continuar en el machito. De hi algunos discursos que se escuchan en el PP de Esperanza, como el que hay quee quitar las subvenciones a partidos y sindicatos, el que hay que privatizar las Tv publicas etc etc, pero todavia solo pequeños movimientos.
  • Luis Bouza-Brey 2010-12-14 17:24:42
    CATALUÑA, EL PSC Y EL MUNDO AL REVÉS, comentario al final, a LA ASIGNATURA PENDIENTE DEL PSC Editorial de “El Periódico” del 13 de diciembre de 2010 Por su interés y relevancia he seleccionado el editorial que sigue para incluirlo en este sitio web El formateado es mío (L. B.-B.) José Montilla hizo ayer un primer análisis de las causas del fracaso electoral del PSC. Apuntó las incoherencias del Govern, la falta de mensaje, la actitud frívola de socios poco institucionales y la animadversión de muchos medios de comunicación. Debería haber añadido tanto los errores de la cúpula del PSC, que ha parecido afrontar un reto superior a la consistencia de su mandíbula, como una autocrítica acerca de su capacidad de construir el nuevo modelo de liderazgo, de verbo austero pero eficaz ejecutoria, que en su día apuntó. El avance claro de Artur Mas en los sondeos ocurrió solo hace 18 meses. Ni Montilla, ni antes Pasqual Maragall, han sabido utilizar la Generalitat para adquirir una estatura superior, algo que Jordi Pujol logró, con mucho trabajo y con TV-3. Destacan las críticas al PSOE por su reticencia al tripartito y el retraso en el desarrollo del Estatut y el pacto de financiación. También por una sentencia del Constitucional que, políticamente (pese a la benévola lectura de Carme Chacón), evidenció que España mantiene un extremo recelo ante todo lo catalán. Pero lo más novedoso es que Montilla viene a admitir que el PSC y el PSOE no han sabido entenderse. Ese es el punto clave. Era arriesgado proseguir el tripartito en el 2006 si el PSOE estaba en contra. No es que el PSC deba obedecer, pero sin estrategia conjunta -si el PSC quería una cosa y el PSOE la contraria, como ha sucedido- era casi imposible que el Gobierno de Montilla, o el de Zapatero, pudieran salir adelante. El PSC ha pagado la crisis y los errores propios; Zapatero también la pagará. Pero hay un plus. La España plural exige un acuerdo a fondo entre el PSC y el PSOE. Para asegurar que España no entiende a Catalunya y constatar que el PSOE, muchas veces, tampoco, sobra el PSC. Para eso se basta CiU y, en el caso de que se deje seducir por la derecha española, está ERC. Ahí está el resultado de las catalanas del 2003 y del pasado 28-M. La asignatura pendiente para el PSC es convencer al PSOE de que no hay estrategia socialista sólida sin el pacto de 1978 de Felipe González (y Alfonso Guerra) con el socialismo catalanista. El PSOE gobierna porque el PSC es siempre el primer partido en las generales, mientras el PP es tercero o cuarto. Al menos, hasta ahora, Comentario final. CATALUÑA, EL PSC Y EL MUNDO AL REVÉS Luis Bouza-Brey (13-12-10) La argumentación que sustenta todo este editorial demuestra la situación anómala de Cataluña con respecto a la democracia: el periódico que vocea las tesis del PSC sigue argumentando como hace treinta años sobre la situación y el sistema político. Muestra de ello es el argumento de que hay que estar renovando permanentemente el pacto del 78, cuando dicho pacto es el que dio lugar a una Constitución que reconocía la autonomía y el bilingüismo de Cataluña, y que ha sido violada por el PSC y sus aliados, con un Estatuto confederal y una política monolingüística que han violado dicho pacto y la norma constitucional resultante de él. Otro segundo argumento falsario es el de que la sentencia del Constitucional significa que España (¿Cataluña no es España?) mantiene un extremo recelo contra lo catalán: no se trata de recelo ante lo catalán por parte del resto de España, sino de que los dirigentes políticos catalanes defienden un modelo social y político etnonacionalista incompatible con la democracia, la modernidad y la unidad de España. Y el PSC apoya por pasiva o por activa dicho modelo, siempre a remolque de los nacionalistas de CIU o ERC. Un tercer argumento falso es el de que el PSOE gobierna España gracias al apoyo del PSC: la realidad es que los dirigentes nacionalistas del PSC han gobernado Cataluña gracias a los votantes del PSOE, ya sea en el ámbito local o en el de la Generalitat. La conclusión que se deriva de esta farsa, que dura ya treinta años, es, o bien que el PSC es un fraude que no sólo no es socialista, sino que es un partido premoderno, reaccionario, antidemocrático y caciquil, o bien que en el PSC no hay una concepción elaborada de la democracia española y catalana ni del modelo de Estado alternativos al del etnonacionalismo. Y han tenido tiempo sobrado para elaborarlo y defenderlo. La demostración del ser fraudulento o inane del PSC es que ante una derrota de las características del 28N, consecuente a ocho años de alianzas y políticas delirantes y demenciales, al núcleo de sus dirigentes sólo se le ocurre la explicación de que es preciso conseguir un grupo parlamentario propio, como si la responsabilidad única del Estatuto confederal y anticonstitucional, de las multas lingüísticas, de las “embajadas catalanas”, de las investigaciones a 11.999 euros sobre el color de la vulva de la almeja madre en el Alt Empordá, de las subvenciones millonarias a los grupos socioculturales independentistas y muchas otras paridas por el estilo, fuera del PSOE. Lo que demuestra todo esto es que el PSC es un partido incapaz de gobernar Cataluña, cuyo proyecto ausente no asciende más allá del ámbito de la gestión local, en muchos casos corrupta, y cuyo ideario se ha quedado estancado en los inicios de la transición, dejando inerme a Cataluña y al conjunto de España ante el delirio etnonacionalista, soberanista-independentista, reaccionario y anacrónico de CIU, ERC e ICV. Su núcleo dirigente está compuesto por nacionalistas camuflados o gestores locales incapaces para la elaboración ideológica y estratégica global, y sus intelectuales se han vendido al poder y a las concepciones premodernas del etnonacionalismo. Un nacionalismo que sabe explotar con habilidad los sentimientos primordiales de la población, al servicio de una mentalidad de hace dos siglos que intenta imponer a una sociedad multiétnica rasgos culturales etnicistas, construyendo un sistema político inadecuado para la mayoría de la población de Cataluña, y orientado a alejarse de España y Europa para satisfacer las ansias de poder y control de una oligarquía política endogámica y corrupta. Y el PSC sigue “erre que erre”, estancado en un conjunto de nociones obsoletas que le llevan a ir a remolque del nacionalismo. Nociones como la de que el incremento sin fin del autogobierno —hasta la soberanía y el vaciado del Estado— siempre es positivo; como la de que los impuestos los pagan los territorios, y no las personas; como la de que la recuperación del catalán debe hacerse suprimiendo el castellano; como la de que las instituciones del Estado deben ser la mera suma de los intereses particulares de sus “naciones” componentes; como la de que no puede existir un partido socialista para toda España, sino tantos partidos “socialistas” como “naciones”; como la de un Estado plurinacional sin Nación común; como la de que los socialistas catalanes deben tener derecho a cogobernar el PSOE, pero los socialistas españoles no tienen ningún derecho a cogobernar el PSC; como la de que lo que diga la Constitución sobre la cooficialidad no tiene valor ético ni normativo, puesto que el idioma “propio” de Cataluña es el catalán, y el castellano una imposición coercitiva externa; como la de que los rótulos, en Cataluña, deben estar “al menos en catalán” —lo que equivale a sólo en catalán—…etc., etc., etc. La pauta orientativa que gobierna al PSC no es la pauta socialista de unión de los diversos pueblos por medio de la democracia y el nacionalismo cívico o el cosmopolitismo, sino la pauta etnonacionalista de separación de los pueblos en base a criterios de diferenciación etnicistas, que absolutizan lo accesorio y anulan la igualdad esencial y la solidaridad propias de la teoría socialista y democrática. Por todo ello, el PSC ha resultado un fracaso para el socialismo democrático, por ser manifiestamente incapaz de construir hegemonía y liderazgo, fomentando con ello la abstención de los catalanes socialistas, que se han limitado a votar al PSOE en las generales, y promoviendo una hegemonía etnonacionalista que ha minado la Constitución y dinamitado la democracia catalana y del conjunto de España. En Cataluña, el mundo está patas arriba: la Constitución se usa como un arma contra la libertad, el reaccionarismo etnonacionalista es considerado progresista, la izquierda es reaccionaria, el Partido socialista de Cataluña no es socialista, y a los ciudadanos que protestan ante esta situación se les considera “fachas”. Y la mayor responsabilidad de esta perversión corresponde al PSC: O el PSC se reconstruye asumiendo las características de un partido español, democrático y socialista, o está y debe estar condenado a desaparecer.