Posibles puntos de acuerdo en la "guerra del clima"
Judith Curry lleva tiempo buscando puntos comunes de encuentro entre los científicos “del consenso” de clima y los científicos “escépticos”. Y también con los científicos no del clima, e ingenieros interesados, del campo escéptico. Para eso abrió su blog [–>], después de haber participado en muchas discusiones en blogs de otros.
Curiosamente, lo mejor que ha producido en ese empeño ha sido la respuesta a unas preguntas muy inteligentes por parte del Congreso USA, donde había tenido una declaración [–>] junto a otros compañeros. ¡Qué envidia! Solo imaginar una sesión del parlamento español, ese circo de asnos pomposos, donde declaren científicos del clima de una tendencia y de otra, y de la que resulten preguntas inteligentes de los parlamentarios, es realmente pensar en otro mundo.
La dra. Curry le dió una vuelta de tuerca al asunto, y pidió opiniones a los participantes cualificados de su blog sobre la respuesta adecuada al congreso.
Su declaración se había enfocado en las incertidumbres de la ciencia del clima, y en el (mal) tratamiento de estas por parte del “consenso”. Muy en la diana. La estrategia alarmista se venía basando en desacreditar a los escépticos según el esquema de una obra aberrante, muy conocida, de Naomi Oreskes. El título es el argumento: Merchants of Doubt: How a Handful of Scientists Obscured the Truth on Issues from Tobacco Smoke to Global Warming.
Es obvio; si la tesis es que los “otros” son mercaderes de la duda que tratan de oscurecer una verdad, no te queda más remedio que vender certidumbre, y una verdad. O sea, la anticiencia por definición. Y es este aspecto anticiencia el que remarcó J. Curry ante el congreso, y sobre el que le piden precisiones. No es que pretenda que todo lo producido es inválido (ella misma es más bien alarmista, aunque sorprendentemente civilizada), pero defiende con toda lógica que la ciencia no podrá avanzar si no digiere las incertidumbres, y no deja de intentar vender la certidumbre que no hay.
Resumiendo algunos puntos:
* Aunque la mayor parte de los científicos del clima no se han adscrito a estas tácticas adversas, los emails del CRU (climategate) revelan una táctica de guerra (dice "siege", sitio) adoptada por un grupo muy influyente y visible de climatólogos.
* Aunque pudo haber al principio "escépticos" motivados políticamente por el liberalismo económico a ultranza, y financiados por las petroleras, según describe el libro de Oreskes, hoy hay muchos escépticos de hoy son gente científicamente competente y sin motivación política, que lo que pide es reproducibilidad de los resultados.
* La climatología usada para política pública debería tener un estándar más alto., de una forma similar a la investigación médica / farmacéutica. Hay literatura científica médica normal, pero se exige un mayor estándar en el contexto de la legislación para las medicinas antes de que lleguen al mercado. La analogía con al clima es el "peer review" normal, contra un proceso de evaluación de mayor responsabilidad para la política. Podría consistir en el control de datos, auditoría de los métodos estadísticos por especialistas en estadística, y de los algoritmos por parte de programadores, etc.
* El IPCC se formó destinado a proporcionar las pruebas de la necesidad de una acción contra el cambio climático, y los correspondientes tratados. Se fundaron programas científicos nacionales e internacionales para apoyar los objetivos del IPCC. Los científicos envueltso en el IPCC avanzaron sus carreras y obtuvieron publicidad personal, y algunos incluso puestos en las mesas de la alta política. Este avance en las carreras de los científicos del IPCC se hizo con la anuencia de las sociedades profesionales y las instituciones que financian la ciencia. Ávidas de publicidad, las revistas de gran impacto como Nature, Science, y PNAS, publican frecuentemente trabajos sensacionales pero dudosos que apoyan la narrativa alarmista. Estas publicaciones, y la atención de los medios, ayudan a empujar el dinero en la dirección de estos científicos, lo que les gana la lealtad de sus instituciones, que agradecen la publicidad y los dólares. Aun más, estas instituciones usan la publicidad para atraer más financiación para la investigación del clima y sus impactos. Y la comunidad científica más amplia acaba siendo cómplice sin advertirlo. Cuando el consenso del IPCC es atacado por escépticos y "anti ciencia", todos los científicos se juntan cual plañideras contra estas fuerzas oscuras que atacan a la cienca, y apoyan al IPCC contra sus críticos.La prensa compra el cuento, y elimina el balance en favor del consenso del IPCC.
* La ciencia está sujeta a error humano, y desvíos como este han ocurrido en el pasado. La ciencia siempre se las arregla para corregirse, pero el proceso no es necesariamente rápido ni indoloro. Dicho esto, la primera reacción del establishment del clima a los emails del CRU (climategate) y los errores identificados en los informes del IPCC ha sido a la defensiva, y con falta de introspección y discusión para la corregirlo. Algunos científicos en el centro de la tormenta parecen estar en una versión científica del "síndrome de estrés post traumático", sobrepasada su capacidad de dar abasto con los problemas.
* En cierto sentido, el IPCC está "funcionando" en términos de recabar apoyo para los tratados auspiciados por la ONU. Pero como evaluación científica de la variabilidad y cambio climático, y las vulnerabilidades al cambio climático, Yo diría que el IPCC no está funcionando.
Comprensiblemente, Judith Curry tiene que precisar al final:Considero segura mi propia reputación científica, así como la financiación de mis investigaciones, así que no siento que estoy arriesgando nada que no pueda arriesgar por hablar. Pero otros científicos se sienten mucho más vulnerables, y he recibido muchos emails de científicos expresando esta preocupación. Esta cultura que se ha desarrollado en la ciencia del clima me preocupa mucho, particularmente en el contexto de los departamentos de las universidades y laboratorios del gobierno. Hace diez años pensaba que un puesto universitario era irrelevante en mi campo. Ahora, la controversia que rodea la ciencia del clima hace que el cargo parezca esencial. El debate científico debería ser la sal de la vida académica; la investigación del clima lo perdió en medio de la politización del tema.Es mucho más largo que esto, y espero que Judy reconozca que Lindzen lo dijo con mayor concisión, y hace muchos años:
- El IPCC llegó a sus conclusiones antes incluso de empezar la investigación.
- Se han saltado todos los esquemas del espíritu científico.
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El post de Judy, completo: