¿Dónde está el calentamiento?
Esa es la cuestión.
Calentamiento quiere decir más calor. Parece obvio, pero sin embargo, lo que estamos midiendo es temperatura, y de una de las partes marginales del sistema. Y temperatura no es lo mismo que calor. Puedes tener por ejemplo un aire a más temperatura, pero con menos calor, por el simple procedimiento de quitarle humedad. Ocurre naturalmente cuando llueve.
Y también ocurre que el aire, la atmósfera, tiene una parte muy pequeña del calor del sistema climático. Aproximadamente el mismo que los primeros dos metros y medio del agua de los océanos. Está claro que la única forma de medir de verdad si el sistema ha ganando o perdido calor, en un plazo determinado, es medir el calor del mar al principio y al final de ese plazo. Pero no pueden, salvo con muy bastas aproximaciones.
De todas las mediciones parciales que hacen del sistema, la mejor debe ser la del calor del mar con las boyas Argo, unos 3.000 por todos los mares, y hasta 700 metros de profundidad.
Pero ni es fácil (necesitan grandes estadísticas, calibraciones y correcciones) ni son rápidos dando los resultados. Empezó en 2003, y sólo encuentro gráficos hasta 2008 o principios de 2009. Tampoco suelen estar de acuerdo todos los que usan las Argo para medir el calor de los océanos. Willis (del "consenso", pero de confianza), el jefe del proyecto Argo, da este gráfico que llega hasta 2008:La profundidad de 700 metros es clave, porque es en esa capa donde está la mayor parte del calor del mar (entre 5ºC y unos 30ºC), y como el 75% del calor total del sistema climático. Pensar que el sistema climático se puede estar calentando sin que se entere la parte que guarda el 75% del calor, y tal vez el 90% de la variacion de calor de corto plazo (Pielke), resulta cuando menos chocante.
Los alarmistas al uso desconfían y critican el sistema Argo. O dicen que el calor se habrá metido por debajo de los 700 metros, sin explicar cómo. Pero no pueden evitar tener en cuenta que los datos están ahí. Pongo el gráfico más actual del NOAA - NODC [-->]. Señalo 2004, que es cuando empiezan a funcionar el sistema Argo. En vez de dar un descenso insignificante del calor acumulado 2004 - 2009, que es lo que se ve con las boyas Argo, dan un aumento insignificante. He añadido una ampliación de la parte post 2004.
Una medida mucho más limitada, pero presuntamente mucho más fácil de hacer y por tanto fiable, es la temperatura media de la superficie del mar medida desde satélites. Por una parte los vaivenes son menores que la temperatura del aire, y por otra es una medición mucho más directa. El sistema bueno de medirlo, hoy, es el satélite Aqua, de la NASA. Funciona desde 2002.
Pongo un cuadro de la medición hecha por el equipo de UAH - MSU, sacado de la web del dr. Roy Spencer. Añado las temperaturas del aire para la misma época medidas por el mismo equipo, y sacadas de WoodForTrees.org [-->]. Para que haya contexto. Ambas con su línea de tendencia (cero para la superficie del mar, insignificantemente descendente para el aire)
* El mejor sistema jamás desarrollado para medir el calor del mar, que dice que no ha habido calentamiento alguno desde que toma mediciones (desde mediados de 2003).
* La temperatura de la superficie del mar (2/3 de la superficie del globo) que no ha subido desde que se mide por el satélite diseñado para medirlo (desde 2002)
* La temperatura del aire, que no ha subido en la misma época (ni desde 1998).
* Un montón de CO2 que según la teoría debería estar haciendo subir esa temperatura, pero no lo hace.
Y la gran pregunta es, ¿que pasa con la teoría cuando el calentamiento que se debería de estar produciendo, no está? Y la respuesta es que los datos son imprecisos, y contradictorios. Por ejemplo, medido por satélites, dicen que el nivel del mar sube a una velocidad que hace necesario que el mar se esté calentando. Pero las boyas Argos no ven subida debida al calentamiento. O usan la temperatura medida por el GISS, con grandes virguerías de "relleno" en el Ártico, donde no hay datos, y dicen que hay gran subida de temperatura del aire. O le añaden a las Argo otras mediciones de mucha menos confianza. O lo que haga falta, con tal de mantener el cuento.
Un trabajo de Agosto de 2010, en International Journal of Geosciences, de R. S. Knox y D. H. Douglass, puede servir de resumen de la postura "escéptica":
A recently published estimate of Earth’s global warming trend is 0.63 ± 0.28 W/m2 (Lyman et al 2010), as calculated from ocean heat content anomaly data spanning 1993–2008. This value is not representative of the recent (2003–2008) warming/cooling rate because of a “flattening” that occurred around 2001–2002.
Using only 2003–2008 data from Argo floats, we find by four different algorithms that the recent trend ranges from –0.010 to –0.160 W/m2 with a typical error bar of ±0.2 W/m2. These results fail to support the existence of a frequently-cited large positive computed radiative imbalance. [-->]
En resumen, que no hay "calor perdido", que la buena medición es la del calor del mar vía Argo, y que si los modelos no coinciden, ajo y agua. Y añaden:
We note thatone recent deep-ocean analysis [16], based on a varietyof time periods generally in the 1990s and 2000s, sug-gests that the deeper ocean contributes on the order of 0.09 W/m2. This is not sufficient to explain the dis-crepancy. Trenberth and Fasullo (TF) [2] believe that missing energy has been accumulating at a considerable rate since 2005. According to their rough graph, as of 2010the missing energy production rate is about 1.0 W/m2,which represents the difference between FTOA ~ 1.4 andFOHC ~ 0.4 W/m2. It is clear that the TF missing-energy problem is made much more severe if FOHC is negative or even zero. In our opinion, the missing energy problemis probably caused by a serious overestimate by TF of FTOA, which, they state, is most accurately determined by modeling. In summary, we find that estimates of the recent(2003–2008) OHC rates of change are preponderantly negative. This does not support the existence of either a large positive radiative imbalance or a “missing energy.” [-->]