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¿Adios a Kyoto?

France-Presse, 28 de mayo, 2011.

DEAUVILLE, Francia: Rusia, Japón y Canadá han dicho en el G8 que no participarán en la segunda ronda de reducción de emisiones de carbono bajo el protocolo de Kyoto en las conversaciones de las Naciones Unidas de este año. Y USA ha reiterado que permanecerá fuera del acuerdo, según informaciones de diplomáticos europeos. El futuro de Kyoto es fundamental para los esfuerzos de negociar reducciones en las emisiones, que tendrán lugar en el encuentro de Durban, Sudáfrica, en noviembre y diciembre de 2011.

Los países desarrollados firmaron el Protocolo de Kyoto en 1997. Acordaron objetivos vinculantes en la reducción de emisiones de gases invernadero. Los acuerdos expiran a finales del año que viene. las naciones desarrolladas aseguran que una segunda ronda del acuerdo es esencial para conseguir acuerdos globales.

Pero Rusia, Japón y Canadá han confirmado que no participarán en un nuevo acuerdo de Kyoto, según los diplomáticos consultados. Alegaron que las formas de Kyoto no exigen que las naciones en vías de desarrollo lleven a cabo reducciones concretas, incluyendo China, el principal emisor mundial.

Durante la cena del último jueves en el G8, Barack Obama confirmó que Washington no se unirá al nuevo acuerdo de Kyoto, según las mismas fuentes diplomáticas. USA, el segundo mayor emisor mundial, firmá el protocolo de 1997, pero en 2001 el entonces presidente Bush dijo que no presentaría el acuerdo para su firma en el senado.

Fuente:

Comentario de la dra. Judith Curry:

Mensaje a los científicos del clima (especialmente en USA): ahora que los tratados de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climátic no parecen deseables, incluso para el gobierno USA más progresista en las décadas recientes (y presumiblemente futuras), por favor, repensad vuestra alianza con la ideología de la ONU / IPCC. Volvamos a hacer ciencia del clima como se debería hacer: cuestionando cada aspecto para ampliar y profundizar nuestro entendimiento del sistema climático, y el espectro completo de posibles escenarios futuros del clima asociados tanto con la variabilidad climática natural y los forzamientos antropogénicos del clima. Y ayudando sólo a los responsables políticos a desarrollar y evaluar un campo amplio de opciones robustas.