La nación india, digo vasca, contra La Vuelta
La nación india, digo vasca, está exaltada, oiga. Así lo han comunicado hace unos días los representantes de los que tienen el asesinato como una herramienta política válida (siempre que sea el asesinato de los demás). En una rueda de prensa sin preguntas, al gusto de estos que van de héroes de la democracia y de la libertad, largaron guapamente:
... hicieron ayer un llamamiento a la sociedad vasca para que la Vuelta Ciclista sea «a su paso por Euskal Herria un marco para la defensa de la nación vasca».
Los ex ciclistas Unai Etxebarría y Josune Artolazábal leyeron un comunicado con su postura sobre el paso de la Vuelta por el País Vasco. Afirmaron que se quiere «escenificar que Euskal Herria no existe» y que la Vuelta atravesará «una comunidad autónoma que es España, tratando de dibujar los símbolos propios y negando que existe una nación que quiere ser dueña de su futuro». [-->]
Como el asunto de la eusco lógica se nos sigue escapando, prescindiremos de intentar averiguar cómo puede el paso de una prueba deportiva tratar de negar la existencia de una nación (o de 25) que quiere ser dueña de su futuro.También descartaremos la posibilidad de aplicar el mismo esquema a la opinión política contraria, del mismo modo que esta se abstuvo de asesinar a los miembros de la nación india para hacer política. O sea, no se trata de proponer que ante los eventos deportivos arapahoes nos pongamos estupendos defendiendo la nación española. Después de todo no somos nacionalistas, ni necesitamos inventar naciones. Se trata, más bien, de seguir descojonándonos con la payasada.Yo creía recordar, de historias de la infancia, que La Vuelta la había inventado El Correo (antes llamado Español), de la mano de Luis Bergareche. Y que por eso siempre pasaba por aquí al principio, sin que las huestes sioux sintieran el menor mal de estómago, en apariencia. Pero me equivocaba. Es deliciosamente parecido, pero distinto.
Las primeras ediciones se corrieron con el nombre de Gran Premio República. Hay que joderse que tampoco fue este un invento de Franco para acabar con la nación vasca. Al contrario, fue un invento de la nación vasca, supongo que para prosperar. Según Wikipedia se trató de un evento deportivo promovido por los fabricantes de bicicletas de Éibar. Y así, la prueba nació con el recorrido ¡Éibar - Madrid! [–>], mientras la nación vasca de siete mil años seguía ignorando felizmente su propia existencia. ¡Qué tiempos aquellos!
Lo de Bilbao vino después. Tras el parón de la Guerra Civil y la II Guerra Mundial, y algunos intentos que no consolidaron por parte de los diarios Informaciones primero, y el Ya después, en 1955 se hizo cargo de la prueba EL Correo Español / El Pueblo Vasco, y desde entonces ha tenido continuidad. Cuando yo era niño, lo único seguro de La Vuelta antes de que se estableciera el recorrido del año, es que iba a pasar por Bilbao. Madrid, y otros sitios, podían ser o no ser, unas veces sí y otras no; pero Bilbao era fijo. La Vuelta era una cosa como de aquí. En mi versión de lo que es “toda la vida”, La Vuelta ha sido toda la vida algo tan de Bilbao como pudieran ser Los Chimbos, o el chocolate Chóbil. Y de los tres, sólo queda la Vuelta.
Pero ahora vienen los caganaciones a decir que no tiene justificación deportiva ni de ningún tipo, y que se trata de negar la existencia de una reserva india que quiere decidir su futuro. ¡Joorl! ¿Y por qué no lo pensaron antes aquellos fabricantes de bicicletas de Éibar, primero, y los Echevarrías y Bergareches de El Correo después? Debe ser que los indios no se habían despertado de su largo sueño de siete milenios. ¡Que tiempos aquellos! No había Caballos Locos dando por saco a los ciclistas con naciones de chichinabo. Ni Tribunales Prostitucionales vendiéndoles whisky por encargo de los traficantes.
Y ya puestos, la foto me da una idea. Porque no hay nada más propio de un indio que un caballo entre las patas, ¿no es así? Y resulta fantástico, porque los caballos se los llevaron los blancos. Si hubieran sido nuestros indios locales seguro que hubieran matado a los caballos, ¡por españoles!
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Añadido: Avinareta manda un curioso Power Point, de memoria histórica de la nación vasca en San Sebastián. Viene al caso: