En defensa de un juicio justo para Zougam
No os perdáis la homilía de Pedro J en defensa de un juicio justo para Jamal Zougam. Creo que esta vez ha encontrado el camino bueno en el caso 11-M. Y además, es el tipo de camino donde Pedro J. puede dar el do de pecho. Un nuevo caso Dreyfus. Un acusado y condenado sin pruebas, o con falsas pruebas, de un crimen terrible. Y miembro de una minoría étnica a la que se puede fácilmente señalar como “no nosotros”. Envuelto en una historia - por fin - fácil de seguir, y con motivaciones de los malos fáciles de comprender. ¿Quién es el guapo que se atreve, como juez, a acabar un juicio así sin un culpable? Ni se plantea esa posibilidad. ¿Y quién no puede comprender a la primera las irregularidades de los reconocimientos, y la selección de los tres más “convenientes” entre ocho, y añadirle el nada despreciable aderezo de las ventajas que esos “reconocimientos” han supuesto para los testigos?
Recuerdo cuando estudié el asunto, participando en el blog de Luis del Pino, que el “problema Zougam” fue lo primero que me llamó la atención como punto débil del caso. Digamos como punto débil del “cuento” - no soy abogado. Y cuando en el blog de LdP conseguimos preparar una versión del auto de procesamiento con función de búsqueda, pasando los PDFs del juzgado por un programa de reconocimiento de textos y corrigiendo durante horas y horas a pinrel (unas “vacaciones” de Semana Santa), lo que se me ocurrió fue listar y detallar todas las menciones a Zougam en el auto. No creo que el abogado del Zougam tuviera la herramienta; que yo sepa desde el blog sólo se lo entregaron a los de la AVT, que obviamente no estaban interesados en exculpar a nadie. Y era un escándalo, porque lo que brillaba por su total ausencia era cualquier indicio de relación de Zougam con el resto de la supuesta banda. O bandas, porque en realidad eran tres, y resultaba evidente que Zougam no pertenecía a ninguna de ellas.
Pongo la batallita personal para explicar que sé de lo que hablo. Pero es mucho mejor leer la dominicana de Pedro J, que, ahora sí, ha encontrado el camino bueno. Hay caso, y es muy fácil de explicar. Hasta de adornarse en la suerte. Clic en la imagen, para el que todavía no haya comprado el periódico.
–
––
__/__/__/__/__/__/__/__/__/__/__/__/__/__/