La impunipaz
Siendo la gente de Vasquilandia un conjunto humano destacadamente cobarde, y asombrosamente falto de todas las características que se suelen considerar propias de las sociedades civilizadas, parece difícil que el evento vaya a tener mucho éxito. La corriente, iniciada con la voladura de presas de Zapatero, no va en ese sentido. Y el sentido hacia el que va no es tan difícil de vislumbrar. Basta con echar un ojo al percal.
Un 20% aproximado del paisanaje prefiere votar de forma que su voto suponga un claro aplauso al asesinato de inocentes como herramienta política. Otro tanto, o algo más, oscila entre comprender muy bien esos asesinatos cuando se producen, y exigir que se aplauda a los asesinos si deciden que ya no necesitan seguir asesinando. Otro porcentaje comparable, pero de la sección de los asesinables, opta por el llanto público y emocionado cuando los los asesinos aseguran que ya no necesitan matando, si el ganado se porta bien. Y por una gran agresividad contra todo aquel que se atreva a reclamar justicia. Y queda otro tanto por ciento, también del subconjunto de asesinables, cuya preocupación máxima parece ser que el resto de la chavalería le deje participar en los juegos del patio del colegio.
Escuchar a Pachi López, y hablar de ello, es algo que produce retortijones en el espíritu. Pero no se puede hablar de la vileza de nuestra sociedad sin mencionar al Pachindakari. Y de su último paso en el descenso al abismo de la nueva sociedad fascistoide que viene. Pretende crear dos prodigios. Un “Comisionado para la Convivencia”, y un foro en el Parlamento Vasco donde puedan participar en las decisiones los que legalmente no pueden participar en las decisiones, por ser representantes evidentes de un grupo terrorista.
Este Pachi tiene un discurso … muy particular.
no tiene sentido que no tengan un partido en el que se organicen: Se trata de hacer formalmente legal lo que es ya materialmente real¿Y por qué hemos esperado tanto tiempo? Los centenares de asesinatos eran "materialmente reales", y bien reales. Y a nadie se le ocurrió hacerlos "formalmente legales". Hasta ahora.
Ese es plan, y si Borges lo hubiera incluido en su Historia Universal de la Infamia, parecería ficción. Darle retrospectivamente tratamiento de guerra oficial, al asesinato terrorista utilizado como herramienta política para conseguir el estatus de beligerante de un conflicto internacional. De ahí todos esos comisionados para la paz, la convivencia, y su puta madre. Es lo que se hace tras las guerras, cuando son aceptadas como guerras entre dos contendientes legítimos, en un conflicto bélico de entidades soberanas.
El problema de Pachi es que las guerras, para ser legítimas, no solo tienen que tener una causa legítima de guerra (y su plan está creando causas legítimas nuevas para el futuro), sino que también deben llevarse a cabo por los cauces de las convenciones internacionales sobre la guerra. La “guerra” de Pachi sería una guerra llevada a cabo básicamente con crímenes de guerra. El asesinato de inocentes, de niños, de discrepantes civiles desarmados, y de representantes de la ley de un estado democrático y de derecho europeo.
¿Quiere Pachi tener su guerra para alcanzar su paz? Pues si el Prostitucional le apoya, va a ser cosa de ir pidiendo un Nüremberg, o un tribunal internacional de crímenes de guerra. Cualquier cosa menos la impunipaz. Porque la impunidad nunca ha sido otra cosa que el escalón y la disculpa para la siguiente … guerra, terrorismo, que le llame Pachi como quiera.