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Otra vuelta de tuerca a la estupidez normativa

Sefuela

Antes de nada, debo pedir disculpas por equivocarme al valorar una noticia de ayer. Aunque sabía de la estupidez como criterio básico de elaboración de normas, nunca pude imaginar que llegase a tanto. No esperaba cambio alguno en una de las normas más nefastas que existen en la actualidad (los ratios de capital de Basilea 3), y cuando leí que se había acordado establecer un nuevo ratio, supuse de forma errónea que sustituiría al anterior.

Mi opinión sobre los efectos en la economía de los ratios de capital de Basilea ya las he expresado anteriormente aquí. Constituyen, en mi opinión, el principal obstáculo para  que vuelvan a funcionar los mecanismos de transmisión de la política monetaria. Una buena idea aplicada a destiempo que acaba teniendo un efecto nefasto en la economía.

El nuevo ratio de apalancamiento anunciado ayer se establece en un 3% sobre los activos totales del banco, incluyendo activos que no aparecen en el balance y otros cuyo riesgo se ve reducido por la utilización de colaterales (garantías específicas para determinados casos de impago). Como consecuencia, limita el tamaño total de un banco a 33 veces sus recursos propios. Algo razonable si fuera un ratio único. Dificultaría que la quiebra de un banco tuviera las consecuencias que acarreó al sistema financiero mundial la quiebra de Lehman Brothers.

Si fuera un ratio único, como fue mi primera impresión, eliminaría los efectos negativos que les detallé en mi anterior artículo. Los bancos ya no se verían penalizados por conceder créditos a empresas, no se verían obligados a reducir su saldo total de crédito a las mismas. Empresas viables, pero ahogadas ahora de forma artificial por falta de crédito, podrían salir adelante. A cambio, los estados no tendrían tan fácil financiarse y subiría su coste financiero, obligándoles a realizar los ajustes necesarios para equilibrar (al menos un poco) sus cuentas.

Pero no, no es un ratio único, sino adicional al ya existente. Aunque algunas frases de una de las comunicaciones del BIS sobre este asunto (la nota de prensa) inducían a pensar lo contrario  (The leverage ratio was designed to serve as an important backstop to the risk-based capital measures by constraining the build-up of leverage in the banking system and providing an extra layer of protection against model risk and measurement error.) cuando se intenta acceder al documento completo, ya aparece meridianamente claro : “The Basel III reforms introduced a simple, transparent, non-risk based leverage ratio to act as a credible supplementary measure to the risk-based capital requirements” y “The Basel Committee is of the view that a simple leverage ratio framework is critical and complementary to the risk-based capital framework”

Así que mi gozo en un pozo. No sólo no desaparece la normativa perversa que lastra economías gravemente deprimidas, como la nuestra, sino que se añaden nuevas normas que podrían agravar el problema. En el artículo del Financial Times donde apareció la noticia, titulado" Basel presses ahead with plans to limit bank borrowing" se habla de que tendría efectos positivos sobre préstamos a empresas. Sin embargo, tengo la impresión de que el analista consultado ha cometido el mismo error de interpretación que yo cometí.

En cuanto a cómo se verán afectados los bancos, se habla de que los asiáticos no tendrán problemas. Si se verán afectados (obligados a aumentar su capital o reducir su área de influencia) los bancos americanos. También los grandes bancos alemanes cuyo volumen de operaciones vivas de derivados supera con mucho el máximo que tendrán permitido.  De aquí a 2015 (fecha en que comienza) habrá montones de estudios sobre cómo afecta a cada uno de los grandes bancos.

¿Y todo esto nos importa a nosotros, mortales? Sí. Parafraseando a Dante “Lasciate ogni speranza, voi ch’entrate” Seguimos en el infierno, y no hay nadie con la conjunción necesaria de conocimientos, ideas y posición, que nos pueda sacar de aquí.

PD. Esta vez no echen la culpa a la Unión Europea. La normativa que menciono es de aplicación mundial.


  • Napo 2013-06-28 15:44:39
    Sefuela, tu entrada es fñacil de entender. A lo suno sólo hay que leer algunos párrafos mas técnicos un par de veces. Y nada de gracias. Gracias a tí por entrar en estos temas tan raros y cabroncetes como necesarios saber. Con un buen ( exigiéndolo en su día ) core capital en todas las entidades bancarias no se hubiera llegado a donde estamos. Hubiéramos crecido más despacio pero más seguro, y las Cajas ( los políticos) no habrían podido hacer de su capa un sayo. ¿La Administración Pública? En mi csa siempre me enseñaron que quien no paga sus deudas es de lo peor que uno se puede tropezar en el mundo, y en España quien más ha faltado a sus compromisos de pago ha sido lo publico. ¿Cuántas empresas han cerrado por culpa de los impagos de la Administración? Y para colmo de sus males, después ahan ido a pedirle dinero a los bancarios y no se los han dejado por dos motivos: Uno que las facturas de ayuntamientos y otros no eran descontables y Dos, porque el dinero que había para préstramos lo han dedicado a dejarse a la administración. Ha sido un “contra Dios” tan grande que es difícil no haber llegado aún más hondo. Lo digo en todos los bares y al personal le jode oirlo. Aquí lo repito: Si los vicios te hacen llegar a deberle dinero a la Mafia, es muy fácil que esos vicios te los dejes, bien por las amenazas que te hacen, o por que te maten sin no le pagas. Hay acreedores que son la mejor medicina contra los excesos de uno. Lo mismo nos pasa como España. Hemos tenido suerte. ¡Que suerte! Le debemos la pasta a los alemanes. NO nos van a dejar ahogarnos. Nos dejarán el agua por la barbilla para que podemos seguir respirando y pagádoles, porque si la solución estuviera sólo en nuestras manos ( en nuestros políticos) ya nos estaríamos comiendo los unos a los otros. Aún hay que dar Gracias. Nota: Sefuela, tu que estás en el cotarro, a ver si algún día metes un post que hable de la diferencia ( siempre subjetiva, claro) entre “invertir en bolsa o jugar en bolsa”. Lo digo porque creo que cada vez es más difícil invertir. Creo que cada vez, con el tema de la globalización y esos señores sesudos que cuando hablan sube o baja el pan, es más complicado hacer estudios de inversión con la objetividad que requiere la diferencia entre el acto de invertir o jugar. Como casi siempre mando el post sin repasar lo que he escrito. Perdón por los petardos.
  • Napo 2013-06-27 17:23:38
    Sefuela, si todos los chicos sesudos de la economía explicaran la cosa de las cuentas y números como tu, otro gallo nos cantaría. Pero es que al final casi todo ha sido mentira casi desde el principio. Generalizando: La economía familiar estaba inflada. El gasto se hacía en lo que podríamos llamar cuanta corriente y no en inversión. El personal no mejoraba su casa para que le durase mil años, pedían el préstamo para cambiar de vivienda en el mismo punto de gasto que se cambia de camisa. Las familias no pedían sus prestamos para mega cualificar a sus miembros, de modo que en un futuro próximo pudieran acceder a mejores sueldos. No había una inverson en proyectos que antes o después pudieran reportar más beneficios a la familia en general y así poder hacer esos gasto de “cuenta corriente” sin necesidad de apalancamiento. Las empresas ( muchas ) han ido por el mismo camino. Muchas, aún teniendo buena cartera de clientes, han vivido estos últimos años en la cuerda floja de la solvencia económica. No han sido capaces de decir no ha un pedido. Han cambiado de instalaciones sin una clara y técnica necesidad. Han cambiado de naves y oficinas como simples expeculadores inmobiliarios, metiéndose en deudas y terrenos que no conocían bien. El “Dios proveerá” ha sido el santo y seña. Muchas empresas, relajadas por una constante de beneficios, se han dedicado más a cuidar de su imagen de look que de su imagen comercial. Han jugado al crecimiento mórbido más que a la solidez en las cuentas y a la ductibilidad y maleabilidad que una empresa en el mundo globalizado necesita. ¿Cuántas empresas han obligado y financiado a sus comerciales más eficientes para que aprendan idiomas? ¿Cuántas empresas han ido por delante en los asuntos informáticos sabiendo, como sabemos todos hace muchos años, que lo informático es vital para el mantenimiento y crecimiento de una empresa? NO han sabido ordeñar bien a las vacas gordas. Los bancos, y en particular la Cajas, ha sido ya el acabose De lo estatal no digo ya nada. ¡Pá qué! Coño, este Basilea, veo que aunque jebi, quiere poner las cosas en su sitio. Dar la responsabilidad a quien la tiene. Que la banca no de pasos ( saltos) con los dos pies, sino que vaya paso a paso. Crecer sí. Crecer todos, pero con una estructura ósea acorde con la carne que se ve, y que esa carne sea más músculo que grasa fofo. ¿Habrá daños colaterales? Claro, siempre los hay y algunos muy injustos. Pero si conseguimos que el mundo familiar y el empresarial vuelva a confiar en los bancos y en las instituciones como se confiaba antes, empezaremos a crecer sobre una base sólida de verdad, y así podremos empujar en lo mundial. Mando sin leer lo escrito. Perdón por los petardos.
    • Sefuela 2013-06-28 01:26:01
      Gracias, Napo por tu comentario. Tanto por haberte atrevido a comentar una entrada un tanto difícil de entender, como por lo que dices. Los acuerdos de Basilea tienen la finalidad que comentas: que los bancos sean sólidos y no crezcan hasta ser un enorme castillo de naipes. La idea era buena. Los primeros acuerdos se tomaron en 1988. En 2004, en plena euforia económica, se reformaron y se endurecieron. Tenía sentido en ese momento. Posteriormente se han vuelto a endurecer los requerimientos de capital (la relación entre el capital del banco y las inversiones realizadas), ya en plena crisis. El problema es que para cumplir tienes que incrementar tu capital en un dificil entorno de escasez de dinero, o reducir tu cifra global de préstamos, lo que provoca problemas de refinanciación a empresas que, sin ellos, serían viables y daña la economía. Mata empresas, crea paro y pobreza. Por la formulación del ratio, los bancos dedican sus limitados recursos a financiar a estados comprando deuda pública en lugar de financiar a empresas. Por eso comento que habría sido una magnífica noticia un nuevo ratio razonable que no tuviese un efecto perverso sobre la asignación de recursos y sustituyese al anterior. La finalidad del incremento de solvencia seguiría alcanzándose, pero sin efectos colaterales tremendamente dañinos. Tienes razón en que siempre existen, pero los hay aceptables y destructivos.