¿Y qué tal dimitir como primera medida del plan anticorrupción?
Mariano Rajoy, también conocido como -Sé fuerte, Luis-, va a presentar un plan contra la corrupción. Tal cual. El plan no incluye la expulsión de España de Ánimo, Luis, de apodo Teledeporte. Pero se había reservado la dimisión de Ana No veo el Jaguar Mato como conejo de la chistera para la presentación del plan. O si no es casualidad, y fuera la que fuera la fecha en la que se iba a presentar el prodigio, siempre iba a coincidir con el nuevo escándalo del día.
Tener un plan es una idea muy buena. Pone orden en la acción y facilita su ejecución. Tener ganas no es una idea, pero es una actitud sin la que no hay plan que valga. Y a Rajoy no se le han conocido ganas contra la corrupción, al menos desde la cuna. Bueno, ni contra la corrupción, ni contra nada. Ni a favor de nada tampoco, ya que nos ponemos a analizar. Bien podría ser el tonto más desganado de la historia de España. Se puede comparar -por ejemplo- con Zapatero. Aunque pueden ser parecidos de tontos, en desgana la Marianidad le da mil vueltas a ZP. Ni siquiera tiene ganas poéticas, estilo contar las nubes.
Es verdad que ante una corrucpión absolutamente generalizada como la que tenemos no vale de nada cambiar a las personas. Que hay que cambiar los alicientes. Pero también es verdad que Sé fuerte, Luis bien puede estar entre las personas menos indicadas para comprender los alicientes que hay que cambiar. Porque, o lleva treinta años sin comprenderlos, o lleva treinta años sin ganas. Y una cosa es creer en los milagros, como Pablemos, y otra es creer en la magia. Los marianistas sólo creen en los milagros. ¿Cómo espera el genio que los marianistas voten magia?
También se puede pensar que lo de Mato es el gesto. Siempre muy importante en política para engañar a la chiquillería. Pero es que el gesto se tiene que corresponder con la importancia del problema. Tirar a Mato por la borda es como ponerle una tirita a un cáncer. Produce más risa que alivio. El único remedio verosímil sería que se vaya Mariano.
Pero tampoco. La estrategia de selección negativa dentro de los partidos políticos ha tenido tanto éxito, que cambiar a Rajoy viene a ser una solución tan absurda como lo fue cambiar a Rubalcaba. A ver, no hay más que pensar. ¿Quiénes son los Sánchez & Madina del PP? Cualquiera en el que se pueda pensar sería completamente equivalente a la brillante pareja del PSOE.
La selección negativa es como una bomba de neutrones que eliminara todo signo de inteligencia, personalidad y entereza. Habría que buscar recambio fuera del radio de acción de la bomba. Yo sigo proponiendo Corinna.
Es lista, además de guapa. Y no escribe SMSs.
Así estamos.
Añadido. Enviado por Maleni, para la conversación: