El calentamiento global "escondido" en el fondo del mar, ni es "calentamiento", ni es problema.
Aunque creo que ya lo hemos comentado, esto es algo en lo que hay que hacer hincapié. Y aprovechamos una entrada y un dibujo de WUWT.
A cuenta de La Pausa en el "calentamiento global", el primer argumento alarmista -y el más extendido- es que no hay Pausa, sino que el calor se está yendo a otro sitio diferente. En concreto, al fondo del mar [-->]. ¿Y por qué al fondo? Pues porque en la superficie lo medimos bastante bien, y no ahí no se ve un calentamiento como el que le falta a la teoría de los calentólogos. Lo divertido es que ese calor que se habría escondido en el fondo del mar no podría ser un problema ni siquiera para la imaginación más calenturienta.El dibujo de Werner Brozek que explica muy gráficamente en WUWT es este, y representa una bola de acero de 4 kilogramos junto a un perdigón de 4 gramos, del mismo acero.
Imagina que las dos esferas están a la misma temperatura, y que calientas una de ellas en 1ºC y después las pones en contacto. Es muy distinto lo que pasa, según cuál elijas para calentar antes de juntarlas.
Si calientas el perdigón, tendrá 1º mas de temperatura que la bola, y al untarlos le va a pasar calor a la bola. Hasta que se pongan a la misma temperatura. ¿Qué temperatura va a ser esa, cuando se igualen las temperaturas de las dos esferas? Como la capacidad calorífica de la bola es mil veces mayor que la del perdigón (pesa mil veces más), la temperatura va a ser la misma que tenían antes de empezar. El perdigón pasará todo su calentamiento a la bola, y el conjunto de las dos no aumentará de temperatura. Bueno, aumentará 0,001ºC, que es lo mismo que nada. No se puede notar.
Si en vez de calentar el perdigón 1ºC, lo calientas 10ºC, y después juntas las dos esferas, lo que conseguirás al final es que ambas se queden a una temperatura 0,01ºC superior a la que empezaron. Otra vez nada.
Si haces lo contrario, si subes de temperatura la bola de 4 kilogramos en 1º, y después las juntas, lo que ocurrirá al final es que ambas acaban con un grado más de temperatura. La diferencia está en que has necesitado mil veces mas calor para aumentar en 1ºC la temperatura de la bola que la del perdigón.
Toda la chorrada de que ese calor que imaginan “escondido en el mar” es que, para que fuera un problema, el calor tendría que tener un sistema para volver al aire. Y no lo tiene. Una vez igualadas las temperaturas (en +0,001ºC), el calor no se mueve. O tendría que calentar el mar para que al menos fuera un problema para el mar. Pero como el mar tiene mil veces más capacidad calorífica que la atmósfera, la situación es la misma que la de la bola y el perdigón de los que hablamos.
Es verdad que el calor que no está calentando la atmósfera durante La Pausa del “calentamiento global” podría estar calentando el mar. Pero de tal forma que si el calor que no se ve en el aire, fuera una cantidad de calor que lo hubiera calentado 3,2ºC en un siglo (esa es la teoría) en caso de no haber habido La Pausa; ese mismo calor, llevado al mar, supondría un aumento de temperatura del mar de 0,003ºC. Y no lo podrías ni siquiera medir – no hablemos ya de notar.
En resumen. Si dicen que La Pausa no es cierta porque el calor se ha “escondido en el fondo del mar”, están diciendo una chorrada. Porque ese calor se ha perdido para siempre – a todos los efectos que nos pueden interesar.
Nota técnica. En realidad el mar se está calentando mucho más que esos 0,003ºC / siglo. En lo que se puede medir (bastante mal), parece que como unos 0,2ºC / siglo en la mitad superior del mar, y -aparentemente- nada en la mitad inferior. La media sería 0,1ºC / siglo.
El gráfico de la mitad superior:
Lo que pasa es que la teoría de los calentólogos ya cuenta con calor que va al mar. Y la diferencia, a cuenta de La Pausa, es que en vez de ir al mar (sólo) la mayor parte del calentamiento, se estaría yendo el 100%. Pero ese calor de diferencia entre “la mayor parte se va al mar” y “el 100% se va al mar”, que en temperatura del aire representa 3,2ºC, en temperatura del mar supone mil veces menos. O 0,003ºC. O, literalmente, nada.