Las imaginarias demandas a las "petroleras" ... ¡por ocultar el cambio climático!
Es un asunto que cuesta trabajo tomarse en serio. Pero ha debido salir en alguna prensa en España, como avisa Avinareta. Clic.
La fiscalía le pide a Exxon Mobil montañas de documentos, desde 40 años atrás. Con la idea de que tal vez ocultara a sus accionistas, y al público, dos tipos de conocimientos. El efecto financiero sobre la compañía de las regulaciones de las emisiones de CO2, y los daños del Calentamiento Global Acojonante. Que, se supone, conocían por sus propias investigaciones científicas.
En el primer asunto no voy a entrar. Es irrelevante en la discusión del Calentamiento Global Acojonante, y probablemente sólo lo plantean para tratar de darle un aire de seriedad a la segunda carallada. ¿De verdad cree ese fiscal que Exxon Mobil tuviera información científica desconocida para el IPCC y (se supone) sus miles y miles de científicos? ¿Con qué; con unas decenas de millones; contra los billones y billones de financiación pública? Ojo, que lo que persigue el fiscal no es “contrainformación”, o resultados científicos falsos, sino ocultación de resultados que alegadamente poseyeran, y ocultaran.
Parece una locura, pero tiene explicación. Es más completo leer el original en inglés del trabajo de Shub Niggurath, que yo resumiré:
El Climate Accountability Institute (CAI) es un grupo de activistas climáticos obsesionados en hacer pasar por cierta la idea de que los críticos de la teoría del IPCC lo son por estar pagados por Big Oil. Y que Big Oil ejerce el mismo papel que las tabaqueras cuando la lucha legal por el tabaco. Tiene entre sus miembros a cafres habituales muy conocidos.Como el (auto) falsificador de Premios Nobel, Michael Mann. Así mismo inventor del celebrado “truco para ocultar el declive”; o el “palo de Hockey”, falsificación estadística de las temperaturas del pasado con la que negaba el cambo climático natural. U Oreskes (Merchants of Doubt), una historiadora de la ciencia que llamaría “mercader de dudas” a Descartes, y que ignora la función de la crítica en ciencia.
Nos cuenta Shub:
En 2012 el CAI realizó un seminario en La Jolla. Concebido por Namomi Oreskes y otros, se llamó "Estableciendo Responsabilidad por lso Daños Climáticos: Lecciones de la Industria de Tabaco". Estaba presente Stanton Glantz, un prominente científico activista del control del tabaco, y un puñado de abogados, cientíicos del clima, profesionales de la comunicación, directores de agencias de relaciones públicas, blogueros y periodistas.
Publicaron un informe (pdf)
En ese documento se puede leer todo. El resumen es que la lección del asunto del tabaco fue que el punto de ruptura, lo que cambió la opinión pública y política, y judicial, fue encontrar documentos que mostraban una conspiración para ocultar el efecto de adicción de la nicotina. Según los expertos legales del seminario esa es la palanca legal que puede mover la “guerra del clima”. Nada de la ciencia haciendo predicciones … ¡que se cumplan! Ni media mención a que convenga que los modelos climáticos reflejen algo remotamente parecido a la realidad. Se trata de encontrar documentos que “tiene que haber” (literal), y de poder usarlos legalmente.
Ah, y un elemento clave es el “fiscal simpatizante”
Los fiscales de cada estado pueden exigir mediante citación la entrega de documetos, con la posibilidad de que un sólo fiscal simpatizante tenga éxito en traer a la luz documentos internos sustanciales.Sutileza no les falta:
Aunque tu objetivo final sea derribar la compañía, sería inteligente empezar por pedir una compensación para damnificadosOreskes salta rápido:
Podrías ser capaz de decir, "he aquí la contribución de Exxon a lo que está pasando en Key West o VeneciaSe refiere a la subida del nivel del mar. Un poco difícil a la vista de Jevrejeva 2014.
Pero siempre habrá un “científico simpatizante” que aplique una severa gimnasia estadística capaz de marear a un “juez simpatizante”. Por ejemplo, Michael Mann [A disgrace to the profession –>] sin ir más lejos. 😉
Lo más impresionante es que se puede ver que han ido dando todos los pasos descritos en la estrategia convenida en la reunión.
En Ca’n Curry hay, hoy, un abogado demarcando las evidentes y obviamente insalvables diferencias entre el tabaco y el Calentamiento Global Acojonante.
Pero probablemente no les importa. Se trata de publicidad, y la mera demanda ya es un puntazo -- al margen del resultado. Siempre pueden "explicar" que el juez no lo ha considerado demostrado; por un pelín, es difícil la prueba completa y tal. Y lo conviertes en un culpable no condenado de cara a la opinión pública.La ciencia del Calentamiento Global Acojonante no es ningún problema. No se sostiene. Los alarmistas pueden sobrevivir unos años a base de gimnasia, pero no tantos. En cambio, un buen vals entre los cafres y los jueces es otra película. Ahí no me atrevo a apostar.
Nota: No he seguido mucho el asunto. Me parece una payasada. Exxon sí ha debido financiar investigación del clima, pero que sea un secreto [–>] parece de risa. ¿Tenían la prueba del Calentamiento Global Acojonante que el IPCC no es capaz de encontrar, y nos la ocultaron? ¡Pues sí que tienen mucha fe en la competencia de los científicos alarmistas! ¿Y por qué no nos enseñan esa prueba oculta, y se dejan de vainas?
Hay más info en WUWT.
Pero lo mejor es leer el excelente artículo de Shub Niggurath, del que he sacado casi toda la entrada: Por cierto, saludos a Ferry, que veo que se ha puesto a seguir el blog por RSS. El siguiente paso debería ser que se atreva a contrastar y debatir los datos y argumentos, como los hombres de verdad. 😉