Energías renovables recalentadas y no recalentadas
Por Rafael Fernández-Cotta, desde el Sahel
Hace mas de diez años monté por primera vez una placa solar. Para tener bombillas y cargadores de movil y ordenador, mil eurazos. Cabreado a la vista de la realidad, las energías renovables se ganaron mi merecido desprecio. Mangantes del chisporroteo de las plaquitas y los molinillos, negociazo de unos y ruina de todos formaban parte de mi lenguaje de entonces, cuando Zapatero subvencionaba tirando billetes desde helicópteros.
Para que os hagáis una idea de cómo están hoy los precios este enlace puede ser revelador:
Yo ahora tengo una instalación de 20 placas de 300 W, 6.000 W nominales, 2.000 reales 8 horas al día, entre 10 y 20 kWh al dia.Lo que me ha costado no importa, porque la he ampliado conforme los precios bajaban y la cuenta sería un paparruchi. Lo que importa es lo que cuesta ahora.
Una placa de 300 W cuesta 170 euros. Con 10 placas se tiene una buena instalación. Son 1.700 Euros.
Una batería de 200 amp., de las mejores, cuesta 200 euros. 10 baterías 2.000 euros.
Con 1.000 euros más se compran todos los demás los accesorios y sobra dinero. En total unos 5.000 euros. A parte los soportes para instalarla y los gastos de instalación que dependen mucho de donde y como se haga. Aquí en Senegal es barato, menos de 1.000 euros. En España esas cosas suelen ser más caras.
Esta sería una instalación medianita y cumplidora. 2.000 amperios de batería a 12 voltios son 24 kWh, bién cierto que no es real, pero si es real que da para dos o tres días sin apenas sol.
Una instalación así daría entre 5 y 10 kWh al día. Una nevera viene a consumir menos de 1 kWh al dia. Con una sola placa casi se la alimenta si no sois muchos de familia. Fijaros que la placa y la batería pueden costar poco más que la propia nevera. Y no pagas luz en la vida.
Hoy día la mayoría de los electrodomésticos consumen poco. Una bombilla led de 5 vatios da mucha luz. Una tele de 24 pulgadas, 36 vatios. Ordenadores, móviles, equipos de música, todo es parecido. Los electrodomésticos que más consumen se usan durante poco tiempo, como una picadora o aspiradora.
Las energías renovables pueden ser muy eficientes en su nicho. Y su nicho es cada vez mas grande, aunque está limitado. Si tenemos que montar dos postes de la luz para llevar la red a un chalet, quizás sea mejor gastárselo en placas y no pagar factura el resto de tu vida.
En Senegal se están montado instalaciones de 3 placas, 2 baterías y accesorios por unos 1.000 euros. Eso da para todos los electrodomésticos modernos, incluida una nevera, de la que no puedes abusar con el agua fría. Aquí mucha gente no tiene luz y vive diseminada en aldeas pequeñas y alejadas. Es un nicho muy adecuado para la energía fotovoltaica. En mi pueblo la energía solar está arrasando, sin apenas subvenciones, pero también sería competitiva sin ninguna subvención. (Las placas están exentas de aduanas y la CC EE también ayuda. En España son un poquito más caras, algo más de 200 euros las placas grandes, de 300 W.)
Es estupendo que la gente mejore su nivel de vida y tener electricidad es disruptivo. La modesta ayuda que aquí tienen las placas me parece bien. No tiene relación con el CO2, es simple ayuda al desarrollo. Si nos paramos a pensar, el 80% de la energía doméstica la consumimos en cocina, agua caliente, calefacción y aa. aa.
En el campo y las aldeas, a la vez que se montan instalaciones solares hay que sustituir el carbón vegetal y la leña por gas. En este modelo tan supuestamente ecológico, conforme suba el nivel de vida el gas supondría el grueso del suministro de energía. Eso paradogicamente cierra ciertas puertas al futuro de las renovables. Aún en el caso de que en el futuro la red eléctrica pueda surtirse de las mismas, habremos creado un modelo de viviendas no conectadas que nos obliga a depender del gas.
Atender los mínimos de quienes no tienen ni luz es la más eficiente de las energías renovables. Con unos pocos kWh, con poco dinero, satisfacemos muchas necesidades. El valor es enorme para quien tenga luz, que pasa de la pobreza extrema a la pobreza sostenible. A pesar de su indiscutible utilidad, este tipo de micro instalaciones tendrán cero incidencia en las emisiones y poca en la renta nacional. Y ahí vamos,. Debemos de evitar que la cara más lamentable de las energías renovables sea reducir la pobreza de algunas personas pero no reducir la pobreza de los países.
Para que la renta nacional suba debemos montar cámaras frigoríficas, hacer autopistas que se llenen de camiones y de coches y que las fábricas de cemento funcionen a toda máquina. Mas aviones que lleguen al aeropuerto, mas barcos que entren y salgan cargados de containers. Todo eso se mueve con petróleo. Si queremos desarrollo debemos apostar por una buena red nacional de electricidad, con el correspondiente % de renovables que escale por méritos en el mix sin subvenciones ni sobrecoste. Eso aquí al día de hoy tiene que pasar por el gas y carbón, porque de momento excluimos la nuclear.
Europa puede subvencionar las renovables que quiera, pero en este momento tenemos un menoscabo del crecimiento por falta de suministro en la red que las renovables no pueden cubrir ni de lejos. Muchas compañías estarían encantadas de invertir para montar centrales a gas y carbón, siempre que se es de seguridad. Que se haga ya.