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Original: http://plazamoyua.com/2007/09/07/%c2%bfcambia-el-ambiente/

2007-09-07 - publicado por: soil

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¿Cambia el ambiente?

¿Será Rosa Díez la puntilla del segoleno? Hasta ahora parecía que ZP era capaz de sobrevivir a todos los desatres que iba provocando. Pero de repente el artículo de Elorza

A nadie le ha extrañado que el hoy presidente no informe sobre los datos de que disponía al emprender la negociación con Batasuna/ETA, el alcance de las concesiones rechazadas por la banda, las características de la chapuza montada en torno a De Juana Chaos o las razones para la disparatada admisión parcial de ANV-Batasuna en la legalidad. El episodio navarro ha sido el último de semejante trayectoria antidemocrática, alcanzando niveles de ridículo …

No es que España por ahora vaya a romperse. Es que, como advierte Rosa Díez, el caos creado por Zapatero, al ir respondiendo a las demandas nacionalistas una a una, apunta a una configuración, más que organización, de tipo confederal, ineficaz, propicia a conflictos en cascada y a la afirmación creciente de tendencias políticas pura y simplemente secesionistas.

O el del bestia desorejado de Carnicero, en ElPlural.com de Sopena nada menos, que decide caerse del guindo al leer la entrevista a ZP en El País …

La sensación que he tenido al terminar la lectura es de una profunda desolación: no hay un ápice de autocrítica personal en ninguna de las respuestas y no hay una sola idea que permita sospechar que detrás de tantos lugares comunes y de tantas obviedades haya un proyecto político. Pero esto es lo que hay en este momento histórico al frente de la izquierda española. …

José Luis Rodríguez Zapatero ha abducido al PSOE de la forma más incomprensible: sin proyecto político personal. En un espacio político en el que se ha instalado la levedad, las consignas y los planteamiento vacío, se puede aceptar respuestas como las que da el presidente del Gobierno al director de El País sin que nadie parezca sobresaltarse de la falta de profundidad intelectual y política.

El presidente una vez más nos promete que las cosas van a ir bien. Se permite decir una cosa y la contraria y, como en el país de Peter Pan, nos dice que las cosas serán mejores.

O el de Herman Tertsch, a quien ni siquiera Pepiño podrá llamar facha:

De ganar las elecciones Zapatero con su apuesta por la «modernización definitiva», habrá ese «segundo tiempo» en el que retornará, sin mayores trabas, la coordinación de intereses con ETA y todos los nacionalismos y grupos antisistema. Nadie puede estar seguro de que volvamos a tener unas elecciones en condiciones democráticas y alternancia posible. El centroderecha español ganó por mayoría absoluta las últimas elecciones celebradas en condiciones normales en este país. Si no gana estas puede que no vuelva a haberlas.
(No os perdáis este artículo. Leedlo entero –>)

No hay nada nuevo en realidad, pero parece como si “el ambiente ” hubiera decidido darse cuenta del desplante del gobierno Alemán a ZP, del pitorreo de Argelia hacia las empresas españolas (los grandes campeones nacionales de ZP, ¿se acuerdan?) cobrándose la alineación gratuíta del gobierno con Marruecos, del mentís desde el gobierno de Sarkozy, del desastre sin propośito de enmienda de la política territorial y “antiterrorista” (ejem) del flautista prodigioso. Cosas que hasta hoy también pasaban, pero pasaban como si nada. Es como si se hubieran dado cuenta, repentinamente, de quien es ZP.

Los primeros en darse cuenta debieron los propios sociómetras del PSOE, o del CIS, que viene a ser lo mismo. De ahí esos cambios aparentes que no parecen haber engañado a muchos: esa supuesta firmeza sobrevenida contra ETA, la no menos sobrevenida españolización, y esos nuevos y falsos brindis con los que nos están castigando.

Pero parece que esta vez, al contrario de lo que ocurría hasta ahora, no cuela. ¿Habrá llegado el agua hasta el borde del vaso? ¿O será que Rosa Díez a roto el inestable equilibrio en que la situación estaba enquistada? De momento parece ir viento en popa. Ayer la noticia de que se suman a su proyecto Mikel Buesa y una corriente crítica del PSC. Así que ya no se trata de la deprimente situación en que toda la apuesta era si el PP sería ganaz de ganarle (y por mucho) al PSOE. Hay un nuevo factor. Y por pequeño que sea, da la impresión de que tiene la capacidad de desequilibrar. Y que por eso hemos pasado de un ambiente general del tipo “es imposible que gane el PP” a otra más cercana a un “es imposible seguir con ZP”. La diferencia? Rosa. La rosa que rompe ese cordón sanitario que supone la gran disculpa del sectarismo cerril. Y se acaba a chorros el discurso del “y tú mas”.