• Maleni 2011-01-28 08:42:59
    Hasta tal punto la lengua supone un límite a la libertad (en este caso de circulación y establecimiento) que muchas de los profesionales que deciden ir a otro país, optan por Italia, sí la corrupta Italia, antes que por el Reino Unido y Francia. Ahora mismo se habla de la oferta de Merkel pero mucha gente no la considerará por la barrera idiomática. Si esto se produce en situaciones de países serios y con ofertas atractivas ¿a qué nos dedicamos en este país?. A crear barreras que no existían hasta hace poco, que salen caras y que ademas nos quitan libertad. Es que hay que ser imbéciles.
  • Venancio Buesa 2011-01-28 10:15:55
    Esta entrada es sencillamente magnífica. Enhorabuena a su escribidor Saludos Venancio