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Original: http://plazamoyua.com/2007/01/27/cuestion-de-principios/

2007-01-27 - publicado por: soil

Cuestión de principios.

Rosa Díez, inmensa, en su blog.

 

CUESTIÓN DE PRINCIPIOS.

“Los principios no se discuten. Se aceptan o se rechazan, pero si se pacta un determinado sistema no es posible discutir los principios en que aquel descansa. Si se acepta el Estado constitucional de derecho, no es adminisble someter a debate alguno de sus fundamentos”. Francisco Tomás y Valiente, de un artículo publicado en Temas para el debate, junio 1995, reclamando a los políticos respeto a las decisiones judiciales.

Cuando cualificados representantes del partido que gobierna España le llaman “venganza” a aplicar la ley y hacer justicia; cuando a confraternizar con ETA le llaman “ser valientes”; cuando insisten en llamar “artículos” a las amenazas terroristas por las que ha sido condenado Ignacio de Juana Chaos; cuando desde el Gobierno Vasco se convocan manifestaciones frente al Tribunal Superior de Justicia para protestar por sus decisiones judiciales; cuando la portavoz de ese mismo gobierno dice que la leyes existentes en España vulneran los derechos humanos..

Cuando todas estas cosas ocurren mientras los ciudadanos no nacionalistas del País Vasco siguen teniendo vedada la entrada en determinadas calles de su ciudad; mientras los partidos constitucionalistas siguen teniendo dificultades enormes para presentar sus candidaturas municipales; mientras se intensifica el terrorismo callejero; mientras se sigue extorsionando a los emprsarios; mientras diecinueve terroristas de Segi siguen eludiendo la acción de la justicia…, es difícil no llegar a la conclusión de que la degeneración democrática de este país está ya en un punto de no retorno.

Hay quien parece ignorar que determinadas palabras, determinadas actitudes, son comida para la bestia. Ójala esos hombres y mujeres que se sientan cada día para cumplir su obligación de impartir justicia no sientan nunca el aliento de esa bestia. Porque la bestia existe.

Hay días en que dan ganas de decir eso de que “el último que salga que apague la luz y cierre la puerta”. Hoy es uno de esos días.