El Cículo Balear contra el totalitarismo linguístico.
Comunicado reciente del Círculo Balear:
Hemos tenido conocimiento por la prensa que el director del CP Mestre Guillemet, Miquel Coll, reconoce públicamente que los alumnos de dicho centro son obligados a hablar catalán incluso cuando están en el patio por orden suya. Los profesores de dicho centro controlan el idioma que utilizan los niños en su tiempo de recreo y en el caso de que no sea el catalán les llama la atención.
Ante esta vulneración de derechos fundamentales el Círculo Balear se ofrece a representar judicialmente a aquellos padres perjudicados en una reclamación judicial que ponga fin a esta discriminación lingüística anticonstitucional. Los servicios jurídicos de esta entidad están estudiando la viabilidad para presentar una demanda en nombre del Círculo Balear en defensa de los derechos lingüísticos individuales de los alumnos que son obligados a expresarse en su hora de recreo en catalán.
Lamentablemente esta situación es el resultado de la aplicación del Decreto de Mínimos del uso del catalán, aprobado en 1997 por el gobierno de Jaime Matas, que permite proyectos lingüísticos de centro en los que la enseñanza se imparta al 100% en catalán sin dar opción a elegir a los padres ya que el consejo escolar usa su mayoría de profesores más dirección del centro en contra de la voluntad de los padres.
Denunciamos también la cobardía y falta de principios del alcalde de Santa Eugenia, Guillem Crespí (PP), que se muestra favorable a un sistema lingüístico de educación como el del CP Mestre Guillemet en el que se vulneran libertades individuales, escudándose en la falta de quejas de los padres. Padres que tienen miedo a posibles represalias sobre sus hijos por parte de directores y profesores totalitarios como el sr Miquel Coll, a quién tampoco le importa que el 12% de los alumnos sean extranjeros con escaso dominio del español, provocando a su vez un elevado fracaso escolar.
Animamos a los padres a contactar con nosotros para no seguir permitiendo actitudes antidemocráticas como las que suceden en este centro y en otros de Baleares y demandar judicialmente a todos ellos para devolver la normalidad democrática al sistema educativo.
Jorge Campos