Los negacionistas del cambio climático natural
Un artículo del doctor R. Spencer [–>], que se encarga de medir las temperaturas globales desde satélites de la NASA para el equipo UHA -MSU, de la Universidad de Alabama - Hunstville. A destacar el uso de la palabra “negacionistas”, donde con toda razón destaca que si los que se muetran escépticos sobre una influencia notable del CO2 en el clima, merecieran el término “nagacionistas”, con la misma razón lo merecerían quienes niegan la importancia de la variabilidad natural. O sea, que los alarmistas son tan “negacionistas” como los escépticos, solo que niegan otra cosa distinta -pero mucho más evidente.
Aceptado el argumento, y para contrarrestar la grosería algorera, en PlazaMoyua empezaremos a aplicar el término “negacionistas” a los alarmistas. Y que prueben de su propia medicina. 😉 Con especial dedicación al tontito de Blueberry, que habla mucho, pero nunca contesta. En una figura que en inglés llaman hit and run, y en español tirar la piedra y salir corriendo.
Original en inglés:
Rise of the Natural Climate Cycle Deniers
July 29th, 2009. Roy Spencer, Ph. D.Aquelos que promueven la teoría de que la humanidad es responsable del calentamiento global, han sestado trabajando los últimos 20 años en una historia climática revisonista. Una historia en la que el clima ha estado siempre en un balance armonioso hasta que llegó la humanidad y lo chafó.
Los negacionistas de los ciclos climáticos naturales han hecho sus mejores esfuerzos para eliminar el Período Cálido Medieval (MWP) y la Pequeña Edad de Hielo (LIA) de los registros climáticos. A base del infame “Palo de Hockey” sobre las variaciones (o no variaciones) de la temperatura global durante los útlimos 2.000 años, que fue aclamado de forma completamente acrítica.
Antes de ser desacreditado por el panel de revisión de la National Academies, este icono del calentamiento global fue presentado como prueba de la naturaleza estática del sistema climático, y de que solo la humanidad tiene el poder de alterarla.
Mientras este panel fue muy cuidadoso en admitir que el palo de hockey podría ser correcto, señalaron que lo único que la ciencia podía decir con seguridad es que el clima es ahora más caliente que en cuaquier momento de los últmos 400 años. Y como la mayor parte de esos 400 años fueron durante la Pequeña Edad de Hielo, yo diría que eso es una buena cosa. Es como decir que este verano ha sido el período más cálido … desde el último otoño.
Estos negacionistas pretenden que el Período Cálido Medieval fue un fenómeno exclusivamente regional, restringido a Europa. Lo mismo con la Pequeña Edad de Hielo. Y sin embargo cuando una ola de calor mortal asoló Francia en 2003, insistían hipócritamente que era un evento con significado global, causado por el calentamiento antropogénico “global”.
El fuerte calentamiento que ocurrió hasta 1940 es igualmente una espina para los negacionistas de los ciclos climáticos naturales, puesto que los incrementos de las emisiones de carbono eran demasido débiles antes de 1940 para haberlo causado. Asíq que los “expertos” trabajan ahora activamente para reducir la magnitud de ese evento a base de reajustar algunas mediciones de temperatura marine hechas desde los barcos en aquella época.
Sin embargo, ni sueñan en reajustar los registros de termómetros más recientes, que claramente contienen efecto de isla urbana que aun no ha sido ajustado (p.ej., ver esto y esto). Como ha señalado Dick Lindzen, del MIT, es muy improbable que todos los ajustes de los revisionistas climáticos ocuran siempre en la dirección qe conviene a los modelos climáticos.
Por supuesto que ha habido calentamiento global ha ocurrido … al igual que anteriormente ha habido enfriamiento global. Mientras que los “alarmistas” climáticos dicen que nosotros los “escépticos” nos negamos a ver una catástrofe climática venidera, no se dan cuenta que ellos se niegan a ver la variabilidad climática natural. Su contínua referencia a las opiniones de los escépticos como “negacionismo del cambio climático” es prueba, o de su deshonestidad, o de su estupidez.
La prediccione sobre el calentamiento global venidero es un teórico evento del futuro lejano crado por modelos matemáticos, y promovido por científicos y políticos que no tienen nada que perder puesto que pasarán décadas hasta que se pruebe su error. Ponen la mayor confianza en esas predicciones teoréticas, y cierran sus ojos y oidos a los ritmos exhibidos por la naturaleza, tanto en el presente como en el pasado conocido.
Aceptan a gusto que ocurren ciclos en meteorología, pero no pueden (o no quieren) aceptar que también ocurren en climatología. Cada cambio que los negacionistas de los ciclos ven en la naturaleza se lo achacan inevitablemente al hombre. Predeciblemente pronostican cosas como “si eset ciclo continúa, la Tierra está en serio peligro”. Para ellos el comportamieto de la naturaleza es simple, estático, siempre en equilibrio - si no sagrado … en un casi-científico modo, por supuesto.
No pueden concebir a la naturaleza cambiando por sí misma, a pesar de que la evidencia está por todas partes. Al igual que los ambientalistas más activistas, su visión de un mundo romántico, pacífico, y sereno ignora la cruda realidad de que la mayoría de los animales en la tierra están perpetuemente enganchados a una lucha por la supervivencia. Los equilibrios que se forman en la naturaleza no son armoniosos, sino violentos e irregulares jaques mate - como la Gerra Fría entre USA y la antigua URSS.
Mientras, la humanidad hace justo lo que otros animales hacen: modificar y consumir su entorno, en orden a propsperar. Los negacionistas afirman curiosamente que cualquier otra forma de vida tiene derecho a hacerlo -excepto los humanos.
Y cuando los negacionistas de los ciclos piden cambios en la política energética, la mayoría nunca imagina que les vaya a afectar personalmente. Al igual que Al Gore, Robert F. Kennedy jr,., y Leonardo di Caprio, desprecian a la humanidad por pretender los recursos naturales que ellos quieren para sí mismos.
Y los pocos que libremente quieren ese tipo de vida, pretenden negarles a los demás la libertad de elegir, tanto regulando como legislando el comportamiento de cada cual para comformarlo a su propio comportamiento.
La ciencia supuestamente imparcial de los negacionistas de los ciclos naturales está financiada por el dinero de investigación del gobierno, que se sacaría de inmediato si desapareciera el miedo al cambio climático antropogénico. Señalan con desprecio unos pocos millones de dólares que Exxon-Mobil gastó hace años para finaciar a algunos científicos que mantenían un sano escepticismo sobre la ciencia, mientras que el “establishment” científico continúa gastando miles de millones del dinero de tus impuestos.
Así que, ¿quien es el que tiene aquí intereses financieros?
Incluso el IPCC en su último informe (2007) admite que la mayor parte del calentamiento de los últimos 50 años podría ser de origen natural - aunque lo consideran muy improbable, con (según ellos) una probabilidad inferior al 10%. ¿Donde está, entonces, ese 10% del presupuesto de investigación destinado a estudiar esa posibilidad? No existe porque - tal como a unos cuantos políticos les gusta recordarnos, “la ciencia está establecida”.
Los negacionistas de los ciclos naturales se proclaman poseedores del argumento moral, puesto que están salvando las futuras generaciones de los males del (teorético) cambio climático antropogénico. Un par de ellos han pedido juicios de los científicos que permanecen escépticos de la culpabilidad de la humanidad en el cambio climático. Pero las políticas energéticas que defienden está matando a gente pobre viva, alrededor del mundo, hoy. Aquellos que apenas pueden sobrevivir en su pobreza están siendo llevados más allá ldel límite por la subida de los precios del maiz a causa de la producción de etanol, y economías diezmadas por la excesiva regulación e imposición de los carburantes basados en carbono en paises gobernados por élites fariseas.
Pero la marea está cambiando. Según el clima se niega a calentarse tanto como el 95% de lo que los modelos pronosticaban, el público se está haciendo escéptico. Solo el tiempo dirá si el futuro será de calentamiento o enfriamiento. Pero si el siguiente cuadro sobre 18 “proxis” de las temperaturas de los últimos 2.000 años es indicativo, es improbable que la temperatura global permanezca estable durante mucho tiempo.
El gráfico de arriba muestra la media de 18 proxis (sin anillos de árboles) de temperatura de 12 localidades alrededor del hemisferio norte publicado por Craig Loehle en 2007, y revisado posteriormente en 2008. Muestra claramente la variabilidad climática natural, con detalles que coiciden con eventos conocidos de la historia humana.Como el geólogo australiano Bob carter suele enfatizar, no deberíamos preocuparnos del cambio climático provocado por el hombre, sino del cambio que sabemos de cierto que ocurre: el cambio climático natural.Desgraciadamente son los negacionesitas del cambio climático natural los que controlan ahora el dinero, la publicidad, los medios de comunicación, y los políticos.