Lo bueno de la crisis
“Zuga” participa poco, pero protesta mucho.
Más caña a Zapatero, coño.Una lata. ¿Habrá en el universo entero una sola persona menos interesante como tema que nuestro cantamañanas presidente? Es dudoso. Y que se trata de la versión cretina del cantamañanas, ya lo sabemos sin necesidad de que venga El Mundo a demostarlo gráficamente:
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Y sin embargo, a su modo, Zapatero es listo. O espabiliadete. Es hipersensible a la opinión de la gente, y a los matices del poder. Conoce, sin necesidad de pensarlos, los puntos fuertes y los puntos flacos. Tanto los suyos como los de sus enemigos, que mayormente considera a los de su propio partido. Y va a conseguir, sin haberlo racionalizado, que la crisis no tenga siquiera el aspecto positivo que podría haber tenido.
Con la cosa del recorte en el gasto, que le han tenido que imponer desde fuera, está todo el mundo hablando de las distintas preferencias sobre donde meter la tijera. Inevitable. Pero esa es la discusión del tamaño del estado, y una parte muy importante del gasto público es lo que se lleva la mafia chupóptera de los partidos políticos. Y aquí tenéis un perfecto ejemplo del error que Zapatero jamás cometerá: recortar de donde no se vaya a notar. Porque sabe, instintivamente, que eso sería una fortísima baza argumental para los que no defienden el estado todo, como él.
Otros son más demagogos, pardillos, o incluso decentes, que todo puede ser. Y hablan de locuras como la venta o cierre de las televisiones públicas, como Esperanza Aguirre que, muy cuca, enseguida avanza que la ley se lo prohíbe. O José María Barreda, que se cepilla tres consejerías de diez, y más de la mitad de los organismos públicos en Castilla La Mancha. Aunque las cajas de ahorro no habla ni Esperanzita. Nadie propone su venta. O la entrega a los acreedores de las cajas y bancos inviables, cambiando deuda por acciones, y ahorrándonos el FROB (90.000 millones), o buena parte. No, a eso no llega nadie; es la madre del cordero. Tú pagas, ellos siguen mamando.
Cualquiera pensaría, -¡claro, listos, con lo que está pasando la gente qué menos que mostrarles sacrificios del poder. Pero Zapatero razona (o intuye) distinto. Sabe que si recorta de los funcionarios y de los pensionistas, todo el mundo estará deseando volver a la “normalidad”. Pero que si quita un solo duro de lo que se lleva la mafia por el morro, corre el terrorífico riesgo de que la gente se de cuenta de qué gasto no hacía ninguna falta. Ni ningún bien, fuera del corral de los mafiosos. Y Zapatero, extremista como todo cretino, no se anda con medias tintas. Quitará de cualquier parte que le duela a la gente, y de ninguna parte que no se note más allá del enchufado que chupa del bote. Cualquier cosa antes de adelgazar el estado de una forma que la gente se pregunte que para qué hacía falta lo recortado. Pero ni para hacer el paripé, que luego canta.
De los nacionalistas y sus lenguas, y del payaso de Córdoba hablando en catalán en el senado, ya hablaremos otro día. Hoy se trata solo del capricho de “Zuga”. Baste con la foto de El Mundo, otra vez. El pinganillo de Montilla:
- ¿Y qué es lo bueno de la crisis?
Lo que podría haber sido, y gracias a Zapatero no será. Averiguar por la vía práctica qué se le puede quitar al estado, adelgazándolo, sin que la gente sufra consecuencias negativas. Lo que llevan pensando los economistas liberales desde que nacieron. Algo sabrán, y sería el momento ideal para probar alguna de sus ideas, y saber hasta qué punto, o donde, pueden tener razón. Pero haremos justo lo contrario, no vaya a ser que se note.–
Actualización:
Me mandan un ejercicio de futurología. Cartel de la próxima campaña electoral; ZP solidario.
