¿Será Rajoy el político más degenerado de la historia de España?
La gente se pregunta si este tío es un bobalicón acoquinado (¡con mayoría absoluta!), si está esperando a las elecciones andaluzas (y engañando a todo el mundo mientras tanto), o qué es lo que le pasa. Pero el caso es que probablemente no haya en toda la historia de España otro presidente de gobierno, elegido en unas elecciones, que haya actuado más en contra de lo que sus votantes esperaban. A lo que se añade una circunstancia muy especial. Porque se trataba de que nos sacara del fangal en el que nos había metido “el peor gobierno de la historia de España”. ¿No era eso, Mariano?
Todos supusimos que el peor gobierno jamás, lo era por la política que hacía. No hablaban del gobierno más corrupto - a ver quién es el guapo que supera al compañero Felipe - sino “peor”. Y la oposición mariana no tuvo ningún problema en irnos señalando todo lo que ZP hacía mal, por si no fuéramos capaces de verlo por nuestra cuenta. Y eso está muy bien; esa es la labor de la oposición. Lo malo es que se supone que algo le compromete si acaba por llegar al gobierno. Menos en el caso del Mariano este, que parece creer que cuando se llega al gobierno hay un borrón y cuenta nueva, y de lo que dije no me acuerdo. Si eso es cierto, y solemos hablar de “regeneración democrática” para referirnos a la conexión entre la opinión del votante y la acción de los políticos, entonces es casi seguro que ya a estas alturas Rajoy se ha convertido en el presidente de gobierno más degenerado de la historia de España.
Veamos (y no puedo ser exhaustivo porque ni levo las cuentas ni tengo tanta memoria).
- ¿Estaba en contra de la "alianza de civilizaciones"? Si
- ¿Nos va a sacar de ella? NO.
- ¿Estaba en contra del timo del clima, que se l había explicado su primo? Sí.
- ¿Va a hacer algo al respecto? NO.
- ¿Había que hacer todo lo posible, y más, por ilegalizar a los etasunos? Sí.
- ¿Sigue pensando lo mismo? NO.
- ¿Estaba en contra de la nueva ley del tabaco, y a favor de la anterior? Sí.
- ¿Va a volver a la anterior? NO.
- ¿Estaba en contra de que Vizcaya se escriba oficialmente en ortografía arahuaní (o algo así)? Sí.
- ¿Va a hacer algo al respecto? NO.
- ¿Le parecía un horror la política territorial de Zapatero? Sí.
- ¿Va a cambiar el rumbo? NO.
- ¿Estaba en contra de que la industria cinematográfica española viva de las subvenciones en vez de los espectadores? Sí.
- ¿Va a hacer algo al respecto? NO.
- ¿Estaba en contra de la Ley Sinde? Sí.
- ¿La va a quitar? NO, la va a poner.
- ¿Decía que había que corregir la locura de las subvenciones en el sector eléctrico? Sí.
- ¿Lo va a hacer? NO.
- ¿Iba a dejar los impuestos sin subir? Sí.
- ¿Lo ha hecho? NO.
- ¿Estaba en contra de que no se pueda estudiar en Español en cualquier parte de España? Sí.
- ¿Va a hacer algo al respecto? NO.
- ¿Decía que los terroristas se debían de arrepentir y pedir perdón para tener beneficios penitenciarios, más allá de lo que obligue la ley? Si.
- ¿Es lo que hace? NO.
- ¿Opinaba que en el 11-M queda mucho por saber (como los nombres de los terroristas)? Sí.
- ¿Va a impulsar que se consiga? NO.
- ¿Le gustaba el Teledeporte? Sí.
- ¿Le sigue gustando? Es de suponer.
Supongo que podría seguir y seguir, pero ya me he aburrido. O desesperado. Pero creo que se nota la idea implícita que subyace en la lista. Es una pista para comprender al Tancredo del que no se sabe en qué sentido circula en la escalera. No es ningún bobo, aunque pudiera parecerlo. No es mala persona, como bien se nota en cuanto charlas con él. Buen chico, tiene oposiciones, y educación. Cualquier suegra estaría encantada. Pero probó la droga de la política, pasó por la trituradora del sistema de ascenso en los partidos políticos (selección negativa), y no es más que un yonqui de la política. Al final, muy buena gente, pero un degenerado que hará y dirá lo que sea para conseguir el chute sin el que no puede vivir.
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No se me enfade la peña. Sólo es un intento de interpretación psicológica del fenómeno, y yo no soy psicólogo. Luego estoy equivocado. Ma sin non e vero …
Pero hay que reconocer que muy buena pinta no tenía.