Juego y prostitución.
Entonces vino uno de los siete Ángeles que llevaban las siete copas y me habló: «Ven, que te voy a mostrar el juicio de la célebre Ramera, que se sienta sobre grandes aguas, con ella fornicaron los reyes de la tierra, y los habitantes de la tierra se embriagaron con el vino de su prostitución. [-->]
Y después fue EuroVegas.Ya no recuerdo de quién era la frase: Nunca perdía la oportunidad de perder una oportunidad. Y no tengo ni idea de calcular las implicaciones económicas de ese gran centro de vicio y ocio que quiere instalar el maligno en Alcorcón. Pero sí veo que todas las razones en contra que esgrime el progrerío frailuno son de orden moral, y perfectamente equivocadas. Nada nuevo, pero sí más espectacular.
Lo primero que llama la atención es que España parece casi obligada a aceptar un reto así. Salvo que quiera verse arrinconada definitivamente en la marginación. No hay muchas cosas que estemos haciendo bien colectivamente. Entre ellas, tal vez la única sea el turismo. Y no es pura chiripa. España no es el único sitio con playas y sol del Mediterráneo. Y, en mi opinión, no se come mejor que en otras partes. Aunque no nos falte, tampoco tenemos más monumentos o más historia que otros competidores. Ni somos más baratos, o más limpios, o más nada. Pero sí tenemos una ventaja competitiva, que posiblemente estamos perdiendo gracias a los frailes modernos. Lo que cabe, genéricamente, bajo el término “cachondeo”. Y a ese respecto hablamos de verdad de España entera, no de 17 cachitos.
Más bares por milímetro cuadrado que nadie, y no poca anarquía en su gestión. Y cierta tendencia a dejar que la gente se divierta más o menos como quiera, sin grandes preocupaciones por la lata que eso lo pueda producir a los que no se quieren divertir. No es muy civlizado, pero sí puede ser conveniente para el sector del ocio, en sentido amplio. Y si queremos seguir estando entre los primeros, en lo único que hemos hecho bien últimamente, mejor sería que pongamos carne en ese asador, que innovemos, y que no nos olvidemos de aprovechar nuestras ventajas naturales.
La primera pega que le ponen a lo de Euro Vegas tal vez sea su mayor ventaja. ¡Van a dejar fumar! Si tuviéramos inteligencia entre las virtudes que acabamos de destacar -y lamentablemente no es el caso-, veríamos que la solución no es prohibir fumar en el nuevo mega antro de perdición, sino aprovechar para extender la idea por todas partes. Bien hecha, claro; con reductos donde los sensibles queden suficientemente protegidos. Pero evitando la imbecilidad de pasar de ser los más permisivos de Europa, a ser los prohibicionistas más fanáticos. Fanatismo y cachondeo nunca se han llevado bien. Lo suyo sería aprovechar Euro Vegas para acabar con los fanáticos. Y permitirnos volver a nuestro ser, y a lo que hacemos (o hacíamos) bien.
Es curioso que los moralinas van de modernos. Generalmente gente que se pasa el día “en internet”. ¿Y qué es lo que te tropiezas “en internet” todo el rato, quieras o no quieras? ¡Prostitución y juego! Pero no quieren cerrar internet; quieren cerrar Euro Vegas.
Sugiero un paso más. Zonas liberadas de frailes, donde se acepte con naturalidad que la vida es un poco mas “risky” - y por tanto más divertida. Habría muchos ejemplos de medidas a tomar, como elevar el nivel de alcohol permitido al conducir, a partir de la noche. O beber en la calle. O llevar al perro sin bozal. Cosas así. Siempre se le puede dar la vuelta a la filosofía, de forma que el que la hace la paga, pero sin restricciones preventivas. Le llaman libertad, con responsabilidad, y para divertirse es fenomenal. Al fin y al cabo se trata de atraer a todos los amuermados de Europa, y del mundo. A todos los que quieren liberarse por unos días de sus propios frailes.
Y aun tendría una vuelta más de tuerca. Si fuéramos inteligentes - que ya sabemos que no es el caso. De la misma forma que sospechamos que las grandes mafias de distribución de drogas son los que más presionan en favor de su prohibición, porque ahí está su negocio, nosotros deberíamos impulsar en el resto del mundo la moralina de la vida segura, hiperregulada e insoportable, para ofrecer aquí un refugio a los que se quieren liberar del coñazo que nosotros mismos habríamos favorecido. O sea, exportar progres, que tenemos de sobra, y recibir con los brazos abiertos a los afectados por esos progres. Una jugada redonda.
Pero en liberal, ¿eh? Sabiendo el camino general, que cada cual lo recorra a su manera. Pero habría que quitar a Mariano, que es como una monja. Una especie de progre ancien régime, y acojonado.
Y lo de los nacionatas, que son un coñazo, también podría tener su salida. Al norte, el Gran Parque del Vascopiteco. Siete mil años con la lengua de Adán, sin cambiar una coma. Como una reserva india, pero en chalaparta. Mas otro par de parques étnico temáticos, al nordeste y al noroeste, que no voy a describir para no equivocarme. Ellos sabrán sus características, convenientemente diferenciales.
A lo tonto, igual acabamos con la crisis gracias a Euro Vegas. Con la crisis, y con unos cuántos incordios, ya de paso. Pero habría de hacerlo sin que se enteren de mucho. Así como quien no quiere la cosa. Si no, no cuela. Y es que somos tontos.