Por qué tenemos que echarles de los colegios.
Monty de Parabere
Co-posteado en la plaza y en DesdeElExilio.com.
Uno no es de postear, más bien de arrebatos, epigramas (hola V.) y jaleamiento de los escritos que, en éste y otros blogs, escriben los auténticos especialistas. Pero me tienen, no sé si en un exceso de confianza (seguro), por buen observador y, a veces, agudo crítico; y me piden Luis y Plazaeme que les junte unos tuits de una tarde de furia y se lo cuente un poco.Me preocupan muchos asuntos, picoteo de aquí y de allá y con el tiempo, sin ser experto en nada, he llegado a formarme como un pasable especialista en generalidades.
Uno de los temas que más me (pre)ocupa, lógico siendo padre y amo de casa, es la enseñanza de mis hijos. Como mal padre que soy y a la vista de cómo anda la enseñanza hace ya demasiado tiempo, tengo una enorme preocupación por su educación y la insana costumbre de ver qué les enseñan en el colegio. Vamos, que me miro todos sus libros y hago un poquito de homeschooling paralelo, casi subversivo. Intolerable actitud la mía, lo sé.
Me he mesado muchas veces los cabellos, por el sistema en general y por cositas en particular; he tenido discusiones y polémicas con otros padres, con profesores, con familiares, con casi todo el mundo. Alguna vez algo he contado. En comentarios sueltos en DEE, en casa de Plazaeme o en twitter. El otro día estaba especialmente cabreado y lo conté en twitter, iba de energía y niños de 9 años.
En España hemos hecho el imbécil con la energía desde hace muchísimos años, me resulta muy difícil explicarme cómo hemos podido llegar esta situación tan desastrosa sin que se hayan levantado multitudes airadas, sin que el mainstream verde/calentólogo/guay haya sido una y otra vez puesto contra las cuerdas.
Es probable que parte de la explicación tenga que ver con lo que egresamos de nuestros colegios, institutos y universidades; los tuits del otro día, que les pongo agrupados a continuación, son una pequeña muestra de las muchas barbaridades que tranversalmente (sic) inundan e impregnan los programas de enseñanza. Otro día nos preguntaremos cómo y por qué es esto no sólo posible, sino casi imposible que sea de otra manera.
Los tweets:
Monty de Parabere @esopmontaraz 14 h
Luego os cuento por qué hay que echarles de los colegios de nuestros hijos. Un aperitivo:
Monty de Parabere @esopmontaraz
11 h Es sólo un ejemplo, pero casi todo así. "Energía", niños de 9 años. Asunto controvertido.
Monty de Parabere @esopmontaraz 11 h Controvertido, decía, por eso este año resuelto con un trabajo en clase.Que los padres no nos enteremos de nada.
(Hace cinco años, cuando mi hijo mayor estudió esto, les mandaron hacer un postercillo sobre una fuente de energía limpia. Aleccionado por su padre, el mismísimo diablo, hizo un bonito DIN-A3 sobre la energía nuclear. Ignoro desde cuándo esconden a los padres este tema y si mi actitud disidente tuvo que ver en el asunto.)
Monty de Parabere @esopmontaraz 11 h Nada tendencioso el material, por supuesto, vean una muestra: Qué estupendo es lo renovable.
Monty de Parabere @esopmontaraz 11 h Las preguntas, claro, sobre lo estupendasque son las renovables, ¡qué guay!
(El ¡qué guay! es una expresión muy usada por los docentes patrios, sólo les parafraseo, no es que se me haya ocurrido a mí usarla en este contexto, Dios me libre.)
Monty de Parabere @esopmontaraz 11 h El cuadro con los concetos fundamentales que hay que incrustar en las cabecitas, no sea que algún mal padre la líe:(EVITAR y FAVORECER, ojocuidao. La nuclear ni está, ni se la espera. En un texto aparece de refilón. Las renovables no contaminan, pero nada de nada.)
Monty de Parabere @esopmontaraz11 h Y un último remache para que los ninios acaben bien acojonadicos. Se la sopla, parece, pero el subconsciente...
(El subconsciente de los nanos, claro. “Dejadme la enseñanza de los niños y...” La cita es inexacta y no sé de quién ni lo voy a buscar ahora, pero fijo que de algún tipo poco recomendable.)Esto, pacientes lectores, es lo que enseñan sobre la energía a nustros hijos a los nueve años. Malos contenidos, profundamente ideologizados (no nos engañemos, es de lo que se trata) y la peor de las mentiras, medias verdades y ocultación y/o tergiversación de la otra media.
Entiendo que es un tema complejo, pero se me ocurren mil manera mejores de explicar la energía a los niños sin hacer demasidao el cafre y siendo un poquito asépticos (hasta yo soy capaz de ser bastante aséptico pese a mi inquina hacia el timo renovable) y de forma que lo entiendan; de hecho, lo hago y me entienden. Son pequeños, no imbéciles.
Se supone que hay un ejército de expertos (al menos, como tal nos cuesta) preparando el material docente en ministerios, consejerías, comisiones y editoriales, pero esto es lo que producen. Basura.
Por eso digo que hay que echarles de los colegios de nuestros hijos, es una prioridad aunque cueste verlo y cueste más aún ponerse a ello.
Vigilad lo que enseñan a vuestros hijos; como ésta, hay muchas más. Sois padres, tenéis todo el derecho del mundo a que no enseñen basura a vuestros hijos. Si alguien lo niega, miente y es uno de los ladrones que os lo quitaron.
Dejo ya de abusar de su paciencia y la de mis anfitriones (ellos insistieron y se lo han buscado, aunque no hay que tentar a la suerte) pero... ¿se acaba ésto aquí? En absoluto, vean lo que unos años después aprenden en 1º de ESO:
De esto ya hablamos en Plazamoyua aquí, no les entretengo más.